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LABORAL BALANCE

Lleida cierra febrero con 18.210 desocupados, 164 menos que los que registraba en enero

El sector servicios y la industria lideran la caída del paro, y la demarcación tiene 2.400 parados menos que hace un año || El número de afiliados a la Seguridad Social aumenta hasta los 197.700 trabajadores

Imagen de las oficinas conjuntas del SEPE y del SOC en el barrio de Cappont de Lleida.

Imagen de las oficinas conjuntas del SEPE y del SOC en el barrio de Cappont de Lleida.SEGRE

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La provincia de Lleida cerró el mes de febrero con un total de 18.210 parados, cifra que se sitúa en 164 personas menos que las registradas en enero, según los datos publicados ayer por el ministerio de Trabajo y Economía Social. En comparación con el mismo mes del año anterior, el número de desocupados en la demarcación se redujo en 2.432 personas, lo que representa un 11,78 por ciento menos. Del total de los parados en las comarcas de Ponent, Alt Pirineu y Aran, 7.707 son hombres y 10.503 mujeres.

Además 1.433 son menores de 25 años. Por sectores, el de los servicios fue el que impulsó este leve descenso, puesto que redujo el número de parados en 175, hasta dejar en 12.001 las personas sin empleo dedicadas a este ramo. La cifra de desocupados también descendió en 44 personas en el sector industrial, que registra un total de 1.749 parados, y en 11 en la construcción, que suma 1.379.

Por su parte, la entrada al mundo laboral de personas a la que nos les constaba un empleo anterior, como es el caso de un joven que acaba sus estudios y busca su primer empleo, elevó la lista de parados en 61 personas, mientras que el sector de la agricultura, sumó cinco desempleados más, hasta dejarlos en los 1.580. El número de afiliados a la Seguridad Social se situó en las 197.700 personas, lo que representa un aumento en 1.554 personas en comparación con enero y de 2.290 si se hace con los datos del mes de febrero de 2022. La provincia de Lleida siguió así la misma tendencia registrada en el conjunto de Catalunya, donde el número de parados bajó en 356 personas durante el pasado mes, después de subir un 1,53% en enero.

Esto deja el número total de desempleados en los 351.288. La caída es más acusada si se compara con el mismo periodo del año pasado, ya que Catalunya contabiliza 20.372 desocupados menos que entonces.Por su parte, la Seguridad Social ganó en Catalunya una media de 25.603 cotizantes en febrero respecto al mes de enero (+0,72%), lo que sitúa el número total de ocupados en los 3.603.745. A nivel estatal, el número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo subió en 2.618 personas en febrero en relación al mes anterior (+0,09%) tras el fin de la campaña de rebajas e impulsado por el crecimiento del desempleo entre jóvenes, mujeres y extranjeros.

Tras el repunte de febrero, el número total de parados se sitúa en los 2.911.015 desempleados, su menor cifra en un mes de febrero desde 2008, según destacó el ministerio de Trabajo. Por su parte, la afiliación media a la Seguridad Social sumó en febrero 88.918 afiliados, un aumento del 0,44 por ciento que eleva el número total de afiliados medios hasta los en 20.170.142. En el último año el desempleo acumula un descenso de 200.669 parados.

La contratación se desploma en la provincia un 21% en un año

El pasado mes de febrero se registraron en la demarcación de Lleida 8.399 contratos, un 7,5% menos que en enero y un 21,3 por ciento si se compra con el mismo mes de 2022. De todos ellos, 4.579, es decir el 54,5% por ciento, fueron contratos indefinidos, cifra un 38% superior a la registrada durante el mismo periodo del año anterior. Los contratos temporales, por su parte, se redujeron un 48% en comparación con el febrero de 2022, según los datos publicados por el ministerio de Trabajo.

Del total de los contratos firmados durante el mes pasado, la gran mayoría, más de 6.000, fueron en el sector servicios.Por otro lado, las patronales alertaron de que los datos de paro y contratación son “agridulces”, ya que reflejan un estancamiento de la economía, mientras que los sindicatos aseguraron que “reflejan la estabilidad del mercado laboral” un año después de la reforma laboral.

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