AGRICULTURA PROTESTAS
El cereal de secano, en pie de guerra para exigir ayudas para afrontar la campaña
Medio centenar de tractores participan en una marcha lenta en Cervera para denunciar falta de apoyo público
El cambio climático pone en jaque a toda la agricultura, pero los cultivos extensivos de secano lo afrontan sin ninguna ayuda. Así lo manifestó el jueves en Cervera el responsable de cultivos herbáceos, Santi Caudevila. “Es un cúmulo de despropósitos con la conselleria que nos lleva a iniciar una tanda de movilizaciones.
Ya no podemos más”. El sector quedó tocado el año pasado a causa de la sequía. “Como otros sectores, pedimos ayudas de entre 100 y 200 euros por hectárea, tramitamos la documentación, y no se han molestado ni en contestar.
Estamos en que es imposible mirar hacia adelante sin perspectivas, sin poder pagar la deuda de la pasada campaña y sin saber cómo afrontaremos los costes de la actual que se presenta igual de mala”. Para Caudevila, la situación llevará de forma inequívoca al abandono de las tierras: “No se valora la agricultura y nos limitamos a importar productos que no cumplen un estándar de calidad básico”, dijo. Lleida es la principal productora de cereales en Catalunya, con casi 188.000 hectáreas destinadas a la producción de trigo, cebada y maíz.
La tractorada del jueves reunió a cerca de un centenar de agricultores, que se concentraron en Cervera para protestar por la falta de ayudas. Un lema y una cara centraron las protestas: Hechos y no palabras, sobre el cual situaron una fotografía del secretario de Agenda Rural, Oriol Anson, a quien recordaron que que “la de 2022 ha sido la peor cosecha en 50 años”. Los agricultores, básicamente del llano de Lleida, la Anoia y el Solsonès, celebraron a mediodía una asamblea en el pabellón polivalente de la capital de la Segarra.
Posteriormente, los tractores se trasladaron a la rotonda situada sobre el kilómetro 520 de la A-2. Estuvieron hora y media debatiendo si cortaban la autovía o bien seguían el itinerario por la L-311 hasta Tarroja de Segarra pactado con los Mossos. Prevaleció este último recorrido, de 7 kilómetros ida y vuelta.
La concentración provocó algunas retenciones en una jornada de gran afluencia de tráfico en las carreteras por la operación salida de vacaciones.