AGRICULTURA FRUTA
Lleida triplica la importación de manzana y pera en la peor campaña en veinte años
Las heladas de abril de 2022 hundieron la producción de fruta de pepita || Los precios han sido superiores, pero está por ver aún si son suficientes para compensar el incremento de los costes
Las importaciones de manzana y pera se han triplicado en Lleida este año, como consecuencia de la pésima cosecha de la campaña que está a punto de terminar por las heladas registradas en abril de 2022. De hecho, la sido la producción más baja de fruta de pepita de los últimos vente años en Catalunya, según explicó la responsable del área técnica de la patronal frutícola, Afrucat, Sara Ruiz. En concreto, los datos del ministerio de Industria, Comercio y Turismo cifran las importaciones de manzana entre los meses de enero y abril por encima de los 6,6 millones de euros, frente a los poco más de 2,1 del mismo período de 2022.
En el caso de la pera, las compras en otros países alcanzaron los 2,4 millones en los cinco primeros meses de este año, frente a los algo más de 777.000 euros de los períodos de enero a mayo del pasado ejercicio.A la hora de explicar esta evolución, hay que analizar el volumen de producción de Lleida, diezmado por las heladas de abril de 2022, que arrasó la fruta de hueso, pero también mermó la de pepita. Sara Ruiz explicó que los datos de producción de pera registrados a fecha de diciembre pasado se limitó a 96.083 toneladas en Catalunya. Representa un descenso del 27% sobre el año anterior, y un 31% de caída si se analiza con el promedio de las cinco anteriores campañas.
En manzana, la producción alcanzó las 217.850 toneladas una cifra que supone una merma también del 27% con respecto a 2021 y del 22% sobre la media del quinquenio anterior. Con estos datos, Sara Ruiz explicó que la última campaña es la más baja en los últimos veinte años
La cosecha de manzana y pera catalanas, lideradas por Lleida, ha caído un 27 por ciento
Esta baja producción ha disparado las importaciones, en especial de Polonia en el caso de la manzana. La responsable del área técnica de Afrucat indicó que los productores polacos no se vieron afectados por fenómenos meteorológicos adversos.
Por el contrario, Italia y Francia, también grandes productores, tuvieron que afrontar una campaña marcada por bajos calibres de su fruta. Aunque habrá que esperar a las liquidaciones finales de la fruta, las cotizaciones en tablilla se sitúan por encima del año pasado. Si una Golden de más de 75 cotiza a entre 80 y 95 céntimos de euro el kilo, hace un año lo hacía a entre 40 y 50 en Mercolleida.
Cuando los agricultores reciban los pagos de su fruta será el momento en el que podrán valorar si ha compensado la subida de costes.
La sequía condiciona la cosecha que está en ciernes Este año, los campos de frutales se han librado de los efectos de heladas como las registradas en abril de 2022, pero ahora el riesgo llega de la mano de la sequía y las restricciones al riego. Todo ello en un año con buena floración y cuajado, que hacía prever un importante volumen de producción.
Ahora habrá que estar atentos a la reacción de los árboles y la fruta a las bajas dotaciones de agua, primero para conocer cuál será el volumen en kilos que salen de las explotaciones leridanas y también el calibre de la fruta si se garantiza la supervivencia de los árboles.Como publicó SEGRE, el primer turno de riego para garantizar el futuro de los frutales en el ámbito del canal d’Urgell comenzó el lunes 12 de junio. A medida que se empezó a suministrar agua por el canal principal los payeses pudieron empezar a regar las fincas y también llenar balsas para almacenar agua. El miércoles 21, se volvió a cerrar el canal.