AGRICULTURA CADENA ALIMENTARIA
¿Cuánto cuesta producir un kilo de fruta de hueso?
Estudio de Acción Climática y el Creda para dar mayor transparencia a la cadena alimentaria || En los últimos años se ha disparado un 27 por ciento
El coste de producción estimado de la fruta de hueso para el payés se sitúa en una media de 0,409 euros por kilo, según afirmó ayer el secretario de Alimentación del departamento de Acción Climática, Carmel Mòdol. Así lo explicó al presentar el estudio de los costes de producción de melocotón y nectarina correspondiente a la campaña 2023 que ha elaborado el departamento junto con el Centre de Recerca en Economia i Desenvolupament Agroalimentari (Creda) del Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (IRTA).
El director del Creda, José María Gil, remarcó el incremento de alrededor de un 27% del coste de producción de fruta de hueso tanto por hectárea como por kilo entre la media del período 2016-2021 y 2023, sin tener en cuenta el paréntesis de un año tan atípico como fue el 2022 a raíz de las heladas.Así, el coste de producción estimado por payés se situaría en una media de 0,409 euros por kilo, con una horquilla entre el coste mínimo, 0,387 euros por kilo, y el máximo, 0,431 euros por kilo.
Estos datos sirven de orientación para determinar unos costes de referencia aproximados teniendo en cuenta la producción de cada explotación y los gastos inherentes a las características de cada campaña. Y si se tiene en cuenta el gasto en mano de obra familiar y el desembolso de confección, el coste de producción se elevaría hasta 0,992 euros por kilo, con una horquilla entre el mínimo y el máximo de 0,899 a 1,105 euros por kilo.
El secretario de Alimentación remarcó la importancia de estos datos con el objetivo de aportar transparencia a la cadena alimentaria catalana para que todos los eslabones tengan una estimación oficial del coste de producir un kilo de fruta de hueso, en la apuesta del departamento para aportar herramientas que favorezcan un precio justo y digno para el productor y luchar contra la precarización de su trabajo, contribuyendo a su sostenibilidad económica, y de paso también se está luchando contra el desperdicio alimentario.
Mòdol remarcó que este estudio de costes de producción, el segundo tras el presentado el martes en relación a la uva, a los que seguirán otros relativos a otros productos y cuya información se actualizará anualmente, es “una nueva muestra de que el departamento trabaja de la mano de los productores agroalimentarios, las organizaciones agrarias, y el mundo de la investigación para dotar de más herramientas y mayor transparencia al mercado”.