ESNOTICIA
Daños en cerca de 4.400 ha de cultivos
Las fuertes rachas de viento tiran al suelo peras Conferencia en 3.000 ha || Las pérdidas en un millar de hectáreas de olivos llegan al 50%, y en 400 de almendras oscilan del 20 al 30%
La tormenta de lluvia, granizo y fuertes rachas de viento que barrió el jueves las comarcas de Lleida provocó daños en 4.355 hectáreas de cultivos, según el informe hecho público ayer por la conselleria de Acción Climática. El grueso de la superfice, con 2.995 hectáres corresponde a fincas de pera Conferencia, con pérdidas que en general calcula en un 20%. A ellas se suman 950 hectáreas de olivo con daños de un 50% y 410 más de almendros con repercusiones entre un 20 y un 30% de la producción.
El departamento explica que en los municipios de Almatret, Maials y Llardecans, llegaron a caer más de 50 litros por metro cuadrado acompañados de granizo y provocaron fuertes caídas de frutos y defoliación en olivo y almendro, con daños que pueden llegar al 50% del fruto. En el resto del Segrià y las comarcas de la Noguera, Les Garrigues, Pla d’Urgell y Urgell, los fuertes vientos provocaron caídas de frutos, especialmente en variedades de pera a punto de cosechar. Los daños en pera se pueden cuantificar en torno al 20%, según Acción Climática, y son especialmente significativos en la variedad Conference (20%) y en algún caso puntual llegando a una afectación del 40-50%.
Esta pera es muy sensible al viento, que puede provocar roces en la piel en caso de rachas moderadas y roces con ramas y hojas, haciendola que no pueda comercializarse para el consumo en fresco. Cuando el viento es especialmente intenso y el tamaño de los frutos es importante, como es el caso a punto de recolección, acaba cayendo al suelo. En el resto de variedades, la conselleria prevé que los daños pueden oscilar entre el 5% y el 10%.
En ciruelo también se han producido daños por depreciación del fruto como consecuencia de daños en la piel por el viento (20 – 30% del fruto afectado).Agricultores afectados pidieron la peritación urgente de las fincas. Uno de ellos explicaba que una de pera Conference había sido pasto del pedrisco semanas atrás y estaba pendiente de peritación de Agroseguro. Ahora, la misma superficie se ha visto dañada por el viento, con la caída de frutos al suelo.
En caso de que el peritaje no se haga de forma rápida, alerta el productor, teme que pueda acabar viéndose perjudicado por las valoraciones. “Cuando lleguen, si no es pronto, puede ser que no encuentren nada”, se lamentaba, al tiempo que alertaba de los efectos sobre las indemnizaciones de las franquicias que se aplican en caso de siniestro.