GANADERÍA UE
La nueva norma de traslado de vacuno preocupa al sector
Podría hacer que perdiera competitividad y elevaría los costes
Conclusiones de la jornada anual de Asoprovac en Tarragona
Las nuevas exigencias de bienestar animal en el transporte que baraja aplicar la Unión Europea (UE) “complicarán” el comercio del vacuno de carne y pondrán en peligro la continuidad del sector a nivel europeo por la pérdida de competitividad. Esta es una de las principales conclusiones de la jornada anual que organiza la Associació Catalana de Criadors de Vacum de Carn (Asoprovac Catalunya) en el Port de Tarragona en la que participaron, entre otro, la CEO del Grup Montalbán de Almacelles, Mariona Montalbán.
La Comisión Europea tendría previsto, según un borrador filtrado esta última semana, presentar próximamente nuevas medidas en materia de bienestar en el transporte animal. Entre otras, la actualización del reglamento limitaría a 9 horas el tiempo de transporte para los animales con destino al matadero (excepto aves de corral y conejos) y 10 horas para aquellos no destinados al sacrificio. También se prevé ampliar el espacio para los animales, por lo que aumentará la densidad de carga y se endurecerán las normas de aptitud para el trasporte.Teniendo en cuenta esto, la gerente de Asoprovac, Matilde Moro, afirmó que es un reglamento “inasumible para el sector del vacuno de carne”, donde la salud animal durante los traslados está ya muy vigilada y es muy estricta. Por su parte, Montalbán, como representante de una empresa ganadera, remarcó su convencimiento de que, al bajar las densidades de transporte, incrementará las lesiones, las cuales “actualmente son insignificantes”.
También será un sobreesfuerzo añadido la aplicación del nuevo reglamento sobre deforestación, que entrará en vigor de forma general el 30 de diciembre de 2024 y que afectará a toda la cadena de producción de vacuno. La obligatoriedad para los operadores de presentar información documental adicional supondrá una sobrecarga burocrática y un coste añadido que los ganaderos consideran un contrasentido para un sector que ya actualmente dispone de un documento de identidad de cada animal.