La semana laboral de 37,5 horas y subir salarios, ejes del 1 de Mayo

UGT de Lleida ha celebrado este lunes una asamblea de delegados para preparar el 1 de Mayo con varios ejes fundamentales: conseguir la semana laboral de 37,5 horas, subir salarios y establecer un control de precios ante la disparidad de la evolución de los sueldos y la de los productos de la cesta de la compra, entre otros. Así lo explicó ayer el líder del sindicato en Catalunya, Camil Ros, quien defiende que es posible ante los “agoreros”, que consideran que estas reivindicaciones lastrarán la economía e incluso auguran que pueden desembocar en “el apocalipsis de una crisis”. “También decían que era imposible subir el Salario Mínimo Interprofesional a mil euros, y ahí está”, dijo. Ros explicó que el lema de este primero de mayo será Treballar menys, treballar millor, defendiendo que no solo es posible sino que es necesario. Explicó que la jornada de 37,5 horas ya es una realidad en algunos sectores y convenios, pero reivindicó que es clave y puso como ejemplo el caso del comercio y la hostelería. Con todo dijo que se ha de avanzar hacia la semana laboral de cuatro días. Sobre el control de los precios y en una referencia velada al sector de la agroalimentación dijo que “igual lo que había que controlar son los intermediarios”. Agricultores y ganaderos llevan años culpando a otros eslabones de la cadena agroalimentaria del incremento de precios desde el campo hasta la mesa. Ros se reunirá hoy martes con el president en funciones de la Generalitat y candidato de Esquerra, Pere Aragonès, al que expondrá aspectos como la necesidad de revertir, dijo, una década de recortes de la inversión. Consideró que es clave y puso, a modo de ejemplo, la situación en la que se encuentra la prisión de Lleida. Con todo, destacó aspectos positivos de la legislatura, como los acuerdos en materia industrial o presupuestaria y lamentó que no tiraran adelante las últimas cuentas públicas, razón que ha desembocado en las elecciones.

Por otra parte, el líder de UGT en Lleida, José Luis Aguilá, dijo que la provincia “necesita un compromiso conjunto por parte de todas las administraciones y agentes económicos y sociales para fijar unas líneas de trabajo claras para crear empleo de calidad”.