BANCA OPERACIONES
BBVA alertó al Sabadell que no puede mejorar la oferta
La entidad catalana desvela una carta de Torres a Oliu
Insiste en que es un banco “fuerte y con futuro” si sigue en solitario
Banco Sabadell hizo pública ayer en una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) una carta que envió el domingo 5 de mayo el presidente de BBVA, Carlos Torres, a su homólogo del Banco Sabadell, Josep Oliu, informándole de que no había “espacio” para mejorar “en términos económicos” la oferta de fusión.
“Te escribo en seguimiento del correo que te enviaba el pasado martes en el que te adjuntaba nuestra propuesta con los términos para una fusión. Entiendo que la estáis evaluando exhaustivamente para darnos respuesta, y en ese sentido considero que es muy importante que tu consejo de administración conozca que BBVA no tiene ningún espacio para mejorar sus términos económicos”, decía el texto enviado por Torres.La entidad catalana hizo público el contenido íntegro de la carta enviada por Torres a Oliu, en la insistía en que en su propuesta se había “agotado todo el espacio” que había disponible y que no se podía ofrecer una prima mayor, recordando que su capitalización bursátil ya se había visto mermada en 6.000 millones de euros.El presidente de BBVA trasladaba a su homólogo del Sabadell que la ecuación de canje propuesta para la fusión (4,83 acciones de Sabadell por cada título de BBVA, equivalentes a 2,26 euros por acción en el momento de realizar la oferta) suponía “una importante prima” del 30% frente a los precios del día 29 de abril.Tan sólo un día después de esa carta, el pasado lunes, Banco Sabadell rechazó la oferta que BBVA había formulado para fusionar ambas entidades al considerar que generará más valor en solitario. Ayer, Oliu defendió ante su plantilla que la entidad es actualmente un banco “fuerte y con futuro”, después de que haya rechazado la oferta de fusión. En un video remitido a los trabajadores, Oliu insiste que el consejo de administración de Sabadell ha rechazado la oferta porque “no era satisfactoria” para los intereses de su entidad ni para sus accionistas.