Los agricultores cortarán todas las fronteras entre el estado español y Francia el 3 de junio en una protesta "histórica"
Quieren presionar de cara a las elecciones europeas para conseguir una "mayor seguridad alimentaria"
Los agricultores cortarán todas las fronteras entre el estado español y Francia el 3 de junio en una protesta "histórica" y "sin precedentes". Los cortes, que cuentan con el apoyo de una quincena de asociaciones agrarias de todo el estado, se efectuarán a ambos lados entre los agricultores de ambos países en puntos como el Pertús, Irún o el Coll d'Ares.
El portavoz de Revolta Pagesa, Arnau Rubio, dice que el objetivo es presionar de cara a las elecciones europeas para conseguir una "mayor seguridad alimentaria" a través de los renombres "cláusulas espejo" y que se eliminen los impuestos a la energía que se aplican a los productores agrarios como tienen otros sectores.
Los agricultores volverán a la calle y esta vez lo harán en una protesta "histórica" que unirá por primera vez no sólo a los campesinos de diferentes puntos de España sino también de Francia.
Revolta Pagesa ha anunciado este miércoles desde el Pertús, uno de los puntos donde se cortará la AP-7, que el corte se hará el 3 de junio justo a las puertas de las elecciones europeas (9 de junio) y que afectará a "todas las fronteras" entre ambos países. Esto incluye desde Irún hasta el Pertús pasando por puntos fronterizos como el del Coll d'Ares, entre otros.
La medida coincide con la cita electoral y no es casual porque la voluntad del sector es "presionar" a la Unión Europea para conseguir una "mejor seguridad alimentaria" y que se elimine los impuestos a la energía que los aplican.
En un comunicado que han leído en la prensa, los agricultores aseguran que "ante la demostrada inmovilidad de los gobiernos autonómicos estatales y europeos desde el inicio de las movilizaciones y su falta de compromiso, implicación y medidas concretas", se ven "obligados" a unirse creando un "bloque unitario" en "defensa del sector primario.
Las "cláusulas espejo"
En este sentido, llaman a unirse a la movilización a todas las asociaciones, cooperativas, sindicatos, empresas y consumidores -incluidos los transportistas-. El sector quiere que se apliquen las "cláusulas espejo" para que los productos que se importen los diferentes estados europeos tengan que cumplir las normativas que se aplican a los productores de aquí, pero también que se mejoren las leyes de cadena alimentaria y " aplicar" la Ley de preferencia de productos locales.
En cuanto a los impuestos de hidrocarburos, gas y electricidad, quieren que los eliminen como ya se ha hecho en otros sectores.
Aparte de incidir a nivel europeo, los campesinos también instan a los gobiernos español y francés a "iniciar negociaciones" para abordar sus demandas y "encontrar soluciones satisfactorias".
La protesta cuenta con el apoyo de diversas asociaciones agrarias de todo el estado español, entre ellas País Vasco, Aragón, Navarra, Valencia, León, Castilla la Mancha o Cuenca. A la banda francesa, se suma el Movimiento Independiente Francés.
Los cortes se realizarán el 3 de junio a partir de las diez de la mañana y, de momento, prevén que dure unas 24 horas, aunque no descartan que se alargue más días. La previsión es que los campesinos franceses corten en la banda francesa y los de aquí lo hagan en la otra. "No vamos a detenernos hasta conseguir nuestras reivindicaciones", aseguran.
Por su parte, el labrador norte catalán Sebastià Barboteu asegura que se trata de un evento "histórico" porque nunca antes se habían unido los agricultores de ambos países. "Tenemos las mismas problemáticas", afirma.