El cereal de secano da por perdida más de la mitad de la cosecha
La sequía y los conejos afectan al sur del Segrià, parte de la Noguera, el Urgell, la Segarra y la Conca de Barberà
La siega del cereal de secano ha empezado con malas perspectivas por los rendimientos bajos que en algunos casos llegan al 70 y 90% menos de producción. Los motivos son la sequía y los daños por los conejos, y las zonas más afectadas son el sur del Segrià, la parte baja de la Noguera, el Urgell, la Segarra y la Conca de Barberà. El responsable de cereal de JARC, Vicenç Pascual, ha alertado de que dos años seguidos a la baja con costes de producción al alza pueden verter a muchos pequeños productores a "abandonar", por eso se ha reclamado medidas en el Ministerio pero también en el Departamento de Acción Climática. En condiciones normales un cultivo de secano produce unos 2.000 kilos por hectárea y este año, en el mejor de los casos, solo se llega a los 500 o 600 kilos.
La cosecha en el cereal de secano es tan mala en determinados puntos de las comarcas de Ponent que incluso hay algunos campesinos que prefieren más no segar porque cuesta más dinero el gasóleo de la máquina que el que podrían llegar a recoger. Sin embargo, según explica Vicenç Pascual, en algunos casos no hay más remedio que segar igualmente para "limpiar" la finca. Que el rendimiento del cereal es bajo puede apreciarse perfectamente desde la segadora, ya que se pueden ver más claros las líneas de la tierra que de las plantas.
Es el segundo año consecutivo que la cosecha es "ruinosa" en el cereal de secano y según JARC las zonas más afectadas son las comarcas de Ponent, el Camp de Tarragona y el Baix Empordà. Se prevé que más de 155.000 hectáreas, de las 238.000 donde es cultiva cereal de secano en Cataluña, tengan una afectación de entre el 70 y el 100% de la cosecha, y el resto, escasamente se superen rendimientos por encima del 50% en debido a la falta de pluviometría.
Esta afectación se ve agravada en muchos casos por los daños de la fauna salvaje, especialmente los conejos, y las heladas tardías, que han acabado de mermar las producciones. Las últimas lluvias han aportado un cierto impulso a los cultivos en algunas zonas, pero han sido del todo insuficientes.
Previsión de buena cosecha en el regadío
Donde sí habrá una buena cosecha de cereal este año está en el regadío. Tras la grave afectación del año pasado por el cierre anticipado del canal de Urgell a causa de la sequía, este año, salvo en alguna parte donde ha habido algún problema con las dotaciones de riego y también en la fase inicial del crecimiento de la planta, se prevé una cosecha "correcta" y en algún sitio buena, según Vicenç Pascual.
De esta forma, se registrarán recolecciones de entre 6.000 y 8.000 kilos por hectárea. Los precios de venta por eso van a la baja, y los agricultores esperan que al menos se mantengan en 215 o 220 euros la tonelada por la cebada. En cuanto al trigo, todavía es pronto para estimar un precio, pero actualmente está fijado en 240 euros la tonelada. Hasta dentro de una semana no se empezará la siega de la cebada en el regadío y en 15 días se pasará al trigo.