Raimat logra ahorrar el 30% de agua en una parcela de vid con riego soterrado

La bodega Raimat ha arrancado la vendimia marcada por la calidad, gracias a unas condiciones meteorológicas óptimas en general, con solo un único punto negativo, las heladas primaverales, que mermarán el 10% la producción. Este año ha puesto en marcha un sistema de riego soterrado en una parcela que le permite ahorrar un 30% de agua.

El agua es un bien escaso y consciente de ello la bodega Raimat mantiene desde hace dos décadas una apuesta por la investigación y la aplicación de técnicas como el riego de apoyo y de precisión. Un sistema de teledetección identifica sobre el mapa qué puntos del viñedo necesitan agua, cuánta y en qué momento preciso y se activa de forma programada el riego inteligente, sólo en los puntos imprescindibles. Además, el los últimos meses, Raimat ha probado con éxito el riego soterrado, a unos 40 centímetros de profundidad para aportar agua directamente a la raíz de la vid y evitar su evaporación. El ahorro de agua con este tipo de riego se sitúa entre el 20 y el 30%. Se ha puesto en marcha en una veintena de hectáreas de Albariño. Junto con otras técnicas, como las cubiertas vegetales (vegetación herbácea entre cepas) o el mulching (acolchados orgánicos con restos vegetales), ha reducido el gasto de agua en el todo viñedo en más del 15% y en la bodega hasta un 50% en la última década.

Además, por primera vez recogerá uvas de cepas que no han recibido ningún tipo de pesticida: ni químico ni orgánico (usado en viticultura ecológica), gracias a un innovador sistema para controlar enfermedades del viñedo como el oídio y el mildiu sólo a través de luz ultravioleta. Se ha aplicado con un prototipo con forma de túnel en una extensión de cerca de 5 hectáreas. Así lo explicó ayer el director de la bodega, Joan Esteve, en el arranque de la vendimia. Calificó las expectativas como muy buenas, con una uva “sana y equilibrada”. La meteorología se ha aliado, en buena medida, con la producción, con un mayo fresco que ha devuelto los trabajos de vendimia a sus fechas habituales. Pero las heladas primaverales situarán el volúmen entre un 10% y un 15% por debajo de su potencial productivo. De las 2.000 hectáreas de viñedos, “probablemente la finca ecológica más grande del mundo”, saldrán unos 6,5 millones de kilos de uva para los vinos Raimat. A ello se sumarán del orden de 6 millones más para vinos base cava de Codorníu, y todos ellos con unas expectativas de calidad muy buenas.Los trabajos de vendimia se adecuan a las horas más frescas de la jornada como momento óptimo para la recogida de las uvas, unas labores en las que trabajan unas ochenta personas. Joan Esteve explicó que la mayoría son personas que participan año tras año en estos trabajos y que buena parte de ellos son agricultores de la zona. Han comenzado con la variedad Chardonnay y después está previsto continuar con Pinot Noir y Xarel.lo, primero para la elaboración de cava y después de vinos, para concluir con las variedades negras a mediados de octubre.

Segrià y Urgell concentran siete de cada diez hectáreas de viñedos

Lleida dedica poco más de 4.500 hectáreas a viñedos, con una distribución territorial claramente dominada por el Segrià y el Urgell, que concentran el 71% de la superficie total, según los últimos datos públicos de la conselleria de Acción Climática. En concreto, sitúa en 4.536 las hectáreas de viñedos, de las que 1.920 corresponden al Segrià y 1.301 al Urgell. Por detrás se colocan Les Garrigues con 601, en la Noguera se cultivan 326 y en el Pallars Jussà dedican a este cultivo 270 hectáreas más. En el resto de comarcas no se alcanza el centenar de hectáreas y en algunas la Generalitat no tiene ninguna finca contabilizada. En concreto son doce hectáreas en el Alt Urgell, una sola en la Val d’Aran, 13 en el Pallars Sobirà, 82 en la Segarra y 10 en el Solsonès. A ellas se suman otras siete en la Cerdanya. Además, cuenta con la denominación de origen Costers del Segre que reúne 4.000 hectáreas de viñas y 36 bodegas. El área de la denominación es diversa tanto en características geológicas como climáticas. Los viñedos están a altitudes de entre los 200 y 1.100 metros. Las subzonas de Artesa y del Pallars son las más septentrionales, con los viñedos de mayor altitud e influencia pirenaica. Raimat, en el extremo oriental, tiene un relieve suave y clima continental, según la información de la propia denominación de origen. La subzona del Segrià, es característica de suelos de secano. Les Garrigues y la Vall del Corb, por su parte, se caracterizan por sus tierras áridas. Raimat es una de las bodegas europeas más precoces en la vendimia y en las próximas fechas la iniciarán el resto del sector.