La economía creció en el 2023 un 2,1% en Ponent y un 2% en el Alt Pirineu i Aran, por debajo de la media del país (2,9%)
El sector servicios mejora en la demarcación, mientras que la construcción pierde peso y la sequía hace caer el sector primario
El catedrático y director del estudio del BBVA, Josep Oliver, y la directora de zona de BBVA en Lleida, Manoli Jiménez, en la presentación del informe económico anual que elabora la entidad.
La economía en las comarcas de Ponent y en el Alt Pirineu i Aran creció en el 2023 un 2,1% y un 2%, respectivamente, por debajo del 2,9% del valor añadido bruto (VAB) de la media catalana. Así se desprende del Anuari Econòmic Comarcal del BBVA elaborado por el catedrático Josep Oliver, que atribuye este crecimiento al aumento del sector servicios, sobre todo de los servicios privados personales, y las manufacturas. La construcción creció con más fuerza en las comarcas de montaña, mientras que la sequía hizo retroceder el sector primario, un 16,1% en Ponent y un 20,1% en el Alt Pirineu i Aran. Ponent ya supera los registros de antes de la pandemia en un 1,1%, en cambio, las comarcas de montaña todavía están un 2,8% por debajo.
El catedrático Josep Oliver prevé que la economía de la demarcación de Lleida crezca este año por encima del 3% y, por lo tanto, "cierre ya el ciclo pandémico" de entre el 2019 y el 2023 y que comprende la crisis de la covid, y la posterior inflación y el aumento de los tipos de interés, además de los efectos de la guerra en Ucrania. Así, se prevé que este 2024 el Alto Pirineo y Arán recupere los registros de antes de la pandemia, mientras que Ponent ya superó estos registros en un 1,1% en el 2023.
Con respecto a Ponent, en el 2023 el VAB creció un 2,1%, sobre todo por el aumento del 3,5% a los servicios (cerca del 68% del VAB), alejado del 8,4% del 2022; la recuperación de la industria con un incremento del 1,9% (en el 2022 era del -1,6%), sobre todo por la mejora de las manufacturas; el moderado avance de la construcción (1,2%) y el retroceso del sector primario (16,1%) por la sequía.
En el Alt Pirineu i Aran, el crecimiento del VAB fue del 2%, encabezados por la mejora de los servicios (2,6%), los cuales aportan cerca del 77% del VAB; y la industria (un 2,3% que representan el 8,9% del VAB), así como la construcción (2,1%), mientras que el sector primario retrocedió un 20,1%.
Oliver ha destacado que el despliegue de la fibra óptica por todo el territorio hace prever un cambio de modelo que haga emerger actividades manufactureras o de servicios personales y no personales en lugares donde tradicionalmente no había. "Es posible que la extensión de fibra óptica por toda Cataluña permita abrir ámbitos que hasta ahora estaban cerrados", ha expresado.
Les comarcas donde más creció la economía fueron el Segrià (3,7%), el Pallars Sobirà (3,5%) y la Val d'Aran (3,1%). En cambio, cayó en el Pla d'Urgell (-1,5%), la Noguera (-0,9%) y la Segarra (-0.1%).
