Belena Gaynor: "No puedo desconectar nunca, pero no me siento una esclava del móvil: ¡me encanta!"

Belena Gaynor era una chica de Guissona que un día colgó un vídeo a YouTube y le cambió la vida. Ahora, con 23 años, es un auténtico fenómeno. A través de Snapchat se puede seguir su día a día prácticamente minuto a minuto. Se guarda cosas, pero reconoce que no se puede desconectar si no quieres que se olviden de ti.

¿Cómo empezó esta locura?

Desde siempre había grabado vídeos de parodias y videoclips que nunca llegué a publicar. Pero el primer vídeo que colgué a YouTube fue el 30 de diciembre del 2011. ¡Explicaba algunas de las tradiciones que todos seguimos el día de Fin de Año, y fue todo un éxito! Lo subí para poder hacer reír a alguien más de lo que fuera la gente que tenía al lado, pero nunca pensé que gracias a eso podría conseguir tantas cosas que tengo hoy en día.

¿Qué quería ser de mayor antes de descubrir YouTube?

Cuando era pequeña quería ser maestra, después quería trabajar en un banco o ser empresaria (pero vi que las matemáticas no eran mi fuerte) y, finalmente, descubrí que el mundo de la publicidad y la comunicación estaba hecho para mí.

Hace charlas para jóvenes emprendedores: ¿se puede vivir del mundo 2.0?

¡Claro que sí! Si dedicas muchas horas y sabes cuidar tu público se puede convertir en un trabajo como cualquier otra relacionado con el mundo del entretenimiento, aunque no es mi caso. Yo trabajo del lunes al viernes en la Sala Sidecar de Barcelona llevando la comunicación y producción de conciertos y cuando tengo tiempo libre, lo dedico a YouTube.

¿Quien la sigue en el Snapchat lo sabe todo de Usted?

¿Se reserva cosas o ha optado por ‘abrir’ su vida? Todo lo que cuelgo refleja como soy yo en todo momento, pero sí que es verdad que me guardo ciertas cosas porque hay una parte de mi intimidad que me gustaría mantener.

¿Una ‘celeb’ del mundo virtual puede tener vida analógica o es una esclava del móvil?

Una celeb virtual es imposible que tenga una vida analógica porque es totalmente incompatible si quiere continuar “en la cresta de la ola” porque sí que es cierto que si desapareces una temporada, la gente se olvida de ti. Y no, no me siento esclava del móvil porque para mí no es un suplicio estar pendiente de las redes sociales. ¡Es más, me encanta!

¿Cuántas veces carga la batería a lo largo del día?

Dos veces, porque estoy bastante tiempo en el ordenador. Si no... [ríe]

¿Qué ‘smartphone’ tiene? ¿Se lo han regalado o eso son leyendas urbanas?

¡Tengo un iPhone 6S, y ojalá me lo hubiera regalado el señor Apple!

¿Cómo se hace para no tener ‘haters’?

La verdad es que no lo sé. De hecho, me sorprende no tener porque cuando te expones tan públicamente es obvio que no puedes gustar a todo el mundo. Pero en mi caso la gente es bastante respetuosa conmigo y lo agradezco mucho. Supongo que tratarlos como me gustaría que me trataran influye de alguna manera.

¿Desconecta (literalmente) alguna vez?

No, imposible. De hecho cuando se me acaban los datos móviles y no tengo wifi... ¡drama!

¿En Guissona es Belena?

Soy la Belén de siempre, nadie es profeta en su tierra.

¿Qué le gusta más de la Segarra?

¡El color que toma el paisaje durante la primavera!

¿Y de Barcelona, donde ahora vive?

El mar. Quizás es el único sitio donde puedo ir a desconectar y olvidarme del móvil durante un rato.