Barcelona vuelve a clamar por la independencia

Cientos de miles de personas se echaron a la calle ayer en la quinta manifestación independentista consecutiva (2012-2016) en Barcelona, una movilización ciudadana que contó con la presencia de numerosos representantes políticos, como su alcaldesa, Ada Colau (ver página 12), el vicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras, el expresidente Artur Mas, el diputado de ERC en el Congreso Gabriel Rufián o el juez Santi Vidal, ahora senador por ERC.

Bajo un calor imponente y una amplia presencia policial (un helicóptero sobrevoló la zona de forma permanente), la concentración duró una hora y cuarto, y se conectó a través de una pantalla gigante con los otros cuatro puntos de Catalunya donde también había movilizaciones. El momento culminante llegó cuando todos los manifestantes levantaron la cartulina circular amarilla a modo de latido, y posteriormente tomaron la palabra las dos principales entidades soberanistas, la ANC y Òmnium, que volvieron a reclamar un referéndum para concretar la independencia. Conducido por la actriz Anna Bertran, el acto buscó un impacto mediático mundial y en él se utilizó el inglés, el francés y el castellano para lanzar un mensaje en defensa del proceso soberanista: “No vamos contra nadie sino a favor. Estamos construyendo una república catalana para todos y para todas”. En los cinco puntos en los que se celebró la manifestación hubo un orador diferente, y en el caso de Barcelona fue el cineasta Pere Portabella, que aseguró que Catalunya no había estado en ningún momento en su historia tan cerca de ser un Estado. Para soportar el calor, aguas a un euro y cervezas y refrescos a dos, y para combatir el hambre, bocadillos a cuatro, en un acto en el que el símbolo protagonista fue de nuevo la bandera independentista catalana, la ‘estelada’ desde una hora antes de arrancar la protesta en el Paseo de Sant Joan, abarrotado hasta el Arco del Triunfo.