Desmantelando Magisteri

El edificio de Magisteri, en desuso desde hace más de veinte años cuando fue desalojado tras detectar vigas con aluminosis, está a punto de pasar a mejor vida. El parking ubicado en el patio, que daba servicio a la Zona Alta, comenzó ayer a ser desmantelado. Operarios retiraron el cartel, los focos, las barreras de acceso, las máquinas para pagar, el ordenador de la oficina, los extintores y otros elementos para dejarlo “limpio” para el derribo. Hoy está previsto vallar el edificio para empezar a vaciar su interior, donde aún quedan algunos muebles, escombros y basura (durante un tiempo, sirvió de hogar a indigentes). Después, comenzará la demolición, primero manual y después de forma mecánica.

Según el proyecto de “deconstrucción”, la superficie a derribar es de 7.183 m², mientras que la del solar es de 5.225, y el objetivo es recuperar la mayor parte posible de elementos constructivos para reciclarlos. El edificio tiene forma de ‘L’, y en una ala acogió la facultad de Magisteri y en la otra, la escuela Pràctiques II. Es propiedad de la Generalitat, tras una permuta con la Paeria, que tenía intención de derribarlo y construir un inmueble para unificar sus sedes en la ciudad. La crisis lo frenó, y ahora hará un parking.