Acepta 3 años de cárcel por estafar 464.000 € a clientes de su banco

Un vecino de Bellpuig de 51 años aceptó ayer una condena de tres años de prisión por haberse apropiado de 464.000 euros de inversiones de dos particulares y una empresa clientes del banco para el que trabajaba. El juicio estaba fijado en la Audiencia de Lleida, pero antes de su inicio las partes llegaron a un acuerdo por el que el acusado se reconoció culpable de los hechos y aceptó una condena de dos años de cárcel por un delito continuado de apropiación indebida y otro más por falsificación de documento mercantil (falsificó documentos del banco y firmas), así como una multa de algo más de dos mil euros.

La pena es sensiblemente inferior a la que la Fiscalía solicitaba en un inicio y que ascendía a seis años y medio de cárcel. Según el Ministerio Público, el acusado, que trabajaba para Mediolanum (anteriormente Fibanc), se dedicaba a promover entre sus clientes productos financieros y de inversión. Así, dos particulares ingresaron 85.000 y 100.000 euros y una empresa, 190.000. Sin embargo, el condenado desviaba el dinero a cuentas particulares y simulaba que había hecho las inversiones, falsificando firmas de superiores y mostrando certificados fraudulentos.

Reconoce los hechos y acepta una pena de dos años por apropiación y otro, por falsificación

A pesar del acuerdo en el apartado penal, una de las partes, la defensa del banco Mediolanum, se mostró en desacuerdo a asumir la responsabilidad subsidiaria en uno de los tres casos, el de la inversión de 85.000 euros, por lo que se inició el juicio para dictar sentencia en este aspecto. “El dinero de este señor se dedicó a tapar agujeros de otros clientes. Yo no me quedé ni un euro, seguía instrucciones del banco. Era una dinámica que me encontré”, aseguró el condenado. “En 2008 me ofrecieron reinvertir un dinero. Tres años después, al mirar el extracto vi que no estaba el dinero”, recordó la víctima que destapó el caso.

La entidad financiera ya ha resarcido a dos de los afectados pero, respecto a la indemnización del tercer inversor (85.000 euros), considera que es responsabilidad exclusiva del acusado. Directivos de la entidad aseguraron que también fueron engañados por su agente comercial en Lleida y que lo despidieron en cuanto detectaron las irregularidades. Sin embargo, Fiscalía y acusación particular consideran que también son responsables.