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La vieja residencia Pare Coll del Eix se perfila como sede del centro de personas sin hogar

Tiene 4 plantas y 2.600 m² y el consorcio que lidera la Paeria ha hecho una oferta de compra || Es de una entidad financiera y el equipamiento podría estar listo en 2018 tras invertir 1,5 millones

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El consorcio para personas sin hogar que integran la Paeria, el Obispado, Arrels y Cáritas prevé trasladar el proyecto de centro de día y residencia para este colectivo, previsto inicialmente en el antiguo mercado de Santa Teresa, al edificio de la antigua residencia del Pare Coll, en la calle Almodí Vell, junto a la Catedral. Para ello, explicó el alcalde Àngel Ros, han presentado una oferta en firme por escrito a la entidad financiera propietaria del inmueble, que esperan que sea aceptada, ya que las posiciones “están muy cercanas”.

Este edificio de cuatro plantas, que lleva una década vacío y deteriorándose, tiene 2.600 m², unos 600 más que Santa Teresa. Ros destacó, además, que la inversión por la compra y su rehabilitación será aproximadamente de un millón y medio de euros –aunque no cuantificó la oferta presentada–, cifra muy inferior al presupuesto previsto para Santa Teresa (unos 2,5 millones). Ello permitirá también afrontar la obra de una sola vez y no por fases, teniendo en cuenta que ya hay un millón de euros disponible de la venta de una casa en San Sebastián procedente de una herencia. El resto está previsto que lo aporte la Paeria con cargo al próximo presupuesto.

El proyecto está impulsado conjuntamente por la Paeria, el Obispado, Cáritas y Arrels Sant Ignasi

Si la negociación para la compra acaba cerrándose en las próximas semanas, a principios del año que viene se hará el proyecto para licitar las obras durante 2017, lo que debería permitir que esté operativo en 2018, afirmó Ros. Añadió que se han analizado otras 3 opciones de edificios antes de decidirse por este, que es el que mejor se adaptaba a los requisitos del consorcio para disponer de un equipamiento residencial que permita también llevar a cabo talleres para fomentar la inclusión social. Además, destacó que es un edificio catalogado que merece la pena recuperar para un uso social.

“Nuestra primera reacción ha sido que ya era hora, porque llevamos desde 2009 con el consorcio. Aporta nuevas posibilidades y tendremos que rehacer el proyecto para ver si podemos dar más servicios o con más amplitud”, afirmó Joan Sunyol, presidente de la fundación Arrels-Sant Ignasi. En principio, el proyecto estaba previsto para dar cabida a unas cuarenta personas, pero ahora podría redimensionarse. Sunyol remarcó que el proyecto no es puramente asistencial, sino que pretende promover el desarrollo personal de estas personas para favorecer su inclusión socal. Será complementario con otro proyecto para los sin techo, el Housing First, que promueve iniciar el proceso de reinserción en la sociedad mediante la concesión de un piso para fomentar la autonomía. Se valorarán las circunstancias de cada caso.

Un inmueble que acogió el colegio Dominiques hasta 1960 El edificio de la antigua residencia del Pare Coll nació vinculado a la congregación de las Dominiques y acogió su escuela, antes del traslado a Vallcalent en 1960. El edificio siguió funcionando como residencia femenina de estudiantes, hasta que acabó cerrando en 2005. Ya no estaba en manos de la congregación y quedó en estado de abandono, lo que ha hecho que se vaya deteriorando, aunque no tiene problemas estructurales. El edificio, obra de Joaquim Porqueres, data de principios del siglo XX y está catalogado.

Vista del  edificio, situado en la calle Almodí Vell, justo al lado de la Catedral Nova.

Vista del edificio, situado en la calle Almodí Vell, justo al lado de la Catedral Nova.

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