Dieciséis presos se fugaron en 2016 en Ponent al no volver de permisos

Un total de 16 reclusos se fugaron el año pasado del Centre Penitenciari de Ponent y el Centre Obert de Lleida al no regresar de permisos, según datos del departamento de Justicia. Se trata de internos que no volvieron a la cárcel tras disfrutar de salidas autorizadas. El caso de mayor gravedad fue el de Tomás Pardo Calvo, conocido como el “violador de Martorell”, que fue detenido el pasado 30 de octubre acusado secuestrar, violar y herir gravemente a una mujer de Igualada tras haber salido de permiso de la cárcel de Lleida, como avanzó SEGRE.

Del total de 16 fugados, 11 corresponden a la cárcel de Ponent y cinco eran del Centre Obert. Respecto a este último centro, el año pasado se registraron un total de 147 altas, procedentes en la mayoría de los casos de la prisión de Ponent, y se trataba de personas que habían obtenido el tercer grado de régimen penitenciario. Es decir, aquellas que han cumplido una cuarta parte de su condena y han mantenido una buena conducta en el interior de la cárcel. En la mayoría de casos, los reos solo tienen que acudir para dormir. Sin embargo, de las 147 altas hubo un total de 31 internos que, por su conducta, perdieron el tercer grado y tuvieron que ser devueltos a Ponent, en régimen cerrado. A estos hay que sumar las 5 personas que se fugaron. Sobre estas cifras, el sindicato CSIF asegura que “esta cantidad de regresiones de grado cuestiona la política penitenciaria de los últimos años llevada a cabo desde Servicios Penitenciarios, en la que parecía que el único objetivo era sacar fuera de las cárceles el mayor número de internos con el única intención de ahorrar dinero lo más rápido posible”. El CSIF ha denunciado durante los últimos años que se están acelerando los procesos para asignar los terceros grados, “lo que supedita la reinserción de los presos a criterios estrictamente materialistas”. El departamento de Justicia no quiso entrar a valorar ayer estas valoraciones.

Justicia afirma que no se puede garantizar el éxito en todos los casos ? El Centre Penitenicari de Ponent registró el año pasado un total de 672 salidas autorizadas de presos por las 1.531 del Centre Obert, lo que supone un total de 2.203 casos. Para el departamento de Justicia, estas cifras demuestran “el bajo porcentaje de quebrantamientos”. La finalidad de los permisos debe ser la preparación de la vida en libertad para el interno, pero resulta imposible garantizar el éxito en un 100%, según una portavoz de Justicia. Los internos fugados que acaban siendo detenidos son acusados de un delito de quebrantamiento de condena y, en la práctica totalidad de los casos, los jueces que les toman declaración dictan su reingreso carcelario. En el caso de Tomás Pardo, Prisiones ya concedió otros 18 permisos de 48 horas antes de su ataque en Igualada.