VIVIENDA CONSTRUCCIÓN
La construcción de pisos en Lleida no arranca y cerró 2016 con un 11% menos de proyectos
Según los visados del Colegio de Arquitectos, aunque la caída fue menor en la capital, del 6,7% || El sector constata que la mejoría no llega, pero prevé que durante 2017 empiece a cambiar la dinámica
Una de las escasas nuevas promociones en obras, situada en Ciutat Jardí, el barrio más dinámico.
La construcción de nuevas viviendas en Lleida no arrancó durante 2016, pese a que en el conjunto de Catalunya y España el sector ya mira hacia arriba. El número de nuevos proyectos de viviendas bajó un 11% durante el año pasado en la provincia (de 319 a 284) y algo menos en la capital, un 6,7% (de 178 a 166), según los datos de visados del Colegio de Arquitectos, que muestran aún cifras de actividad muy bajas. No obstante, las perspectivas están cambiando y los promotores confían en que 2017 sí sea un punto de inflexión. “En Barcelona y Girona van muy bien, pero aquí la mejoría no nos ha llegado todavía. Se puede ver alguna promoción de pisos en Ciutat Jardí, pero no más. Aunque algo comienza a moverse. Hay empresas que están empezando a hacer proyectos y puede ser que en 2017 volvamos a ver grúas plantadas, que ya es hora”, afirmó la presidenta del gremio de promotores, Montse Pujol. No obstante, el sector prevé que esta mejoría se circunscriba solo a barrios atractivos de Lleida ciudad y alguna zona de segundas residencias como la Val d’Aran, pero no en el resto de la demarcación.
El motivo para esta mejoría es la falta de oferta de vivienda nueva, que es generalizada. “El mercado no responde a lo que la gente pide, porque la oferta nueva que hay es muy residual o de pisos pequeños. Ahora, la demanda es de pisos grandes o casas adosadas para familias que se les ha quedado pequeño su piso actual y que son suficientemente solventes para que les den una hipoteca”, señaló Pujol.
Contrasta con la mejoría de las ventas, basada solo en la vivienda usadaLa evolución a la baja de los nuevos proyectos contrasta con las cifras de compraventa de vivienda, que el Instituto Nacional de Estadística difundió esta semana, y que en el caso de la provincia de Lleida muestran un aumento de las ventas del 18% de enero a noviembre de 2016. El motivo es que tres cuartas partes de las ventas son de viviendas usadas, a menudo a muy bajo precio procedentes de embargos de entidades bancarias. Han crecido un 22%, mientras que las de pisos nuevos solo aumentan un 0,5% y con cifras muy bajas. Con todo, este crecimiento del mercado supone un síntoma positivo de cara a la recuperación de la construcción.
