Mundó prevé un colapso en los juzgados por las cláusulas suelo

El conseller de Justicia, Carles Mundó, afirmó ayer que prevé un “colapso” en los juzgados civiles por las reclamaciones de las cláusulas suelo a las entidades bancarias. “No tiene sentido que llevemos al colapso a la administración de justicia después de que el Tribunal Europeo ha resuelto prácticamente todas las dudas, pero la solución que ha propuesto el Gobierno central no es satisfactoria y muchos casos acabarán en los tribunales”, dijo. El conseller hizo estas declaraciones en el Auditori Enric Granados delante de unos 200 abogados de Lleida que celebraron la fiesta de su patrón, Sant Raimon de Penyafort. Durante su discurso, Mundó defendió el uso del catalán en la justicia (actualmente se usa en solo 18 de cada 100 escritos) y criticó que la ratio de jueces catalana (10,5 jueces por cada 100.000 habitantes) esté un punto por debajo de la española (11,5), a pesar de que en Catalunya hay más actividad económica. “Si se igualaran las ratios a Catalunya le pertocarían 70 jueces más, con lo que se repartirían mucho mejor las cargas de trabajo. En Lleida podría abrir un segundo juzgado contencioso y otro social”, afirmó. En este sentido, anunció que en las próximas semanas Cervera contará con un nuevo juez de refuerzo que ya ha sido aprobado por el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya. El conseller también hizo referencia al presupuesto para el año que viene que, si se aprueba, será de 995 millones de euros, el segundo con más dotación de la historia después del de 2010, dedicado en parte a la Ciutat de la Justícia de Barcelona.

Homenajean a Joan Betriu por 50 años de profesiónComo es tradición, el acto de ayer sirvió para pasar el relevo simbólico de los abogados de más experiencia a los más jóvenes. Así, se impuso la toga a 18 nuevos colegiados y se rindió homenaje a los más veteranos. Entre ellos, los que suman 25 años en el ejercicio de la profesión, 40 años (Joan Argilés, Primitivo Borjabad, Lluís Casas y Ramon Clèries) y este año a Joan Betriu Monclús por sus 50 años de ejercicio profesional. “Cuando empecé en Lleida solo había un juzgado de primera instancia e instrucción y un juzgado municipal, además de la Audiencia. Ahora hay una veintena”, recordó Betriu. “Hay más causas, la vida se ha judicializado mucho, entre otros motivos porque ha habido un cambio de hábitos, más movimiento mercantil, etc”. Según Betriu, “la justicia es lenta, pero debe serlo. No puede improvisarse, sobre todo en temas penales que conllevan penas graves”. Hijo de abogado y padre de abogados, Betriu aseguró que “es toda una satisfacción personal haber llegado hasta aquí”.