EQUIPAMIENTOS CONCESIONES
La Paeria aprueba administrar la Llotja con críticas de la oposición
El CNC asumirá la gestión del complejo desde el 1 de marzo por la renuncia de la concesionaria || Los grupos piden un informe económico y un plan de futuro
El consejo de administración del Centre de Negocis i Convencions (CNC), sociedad de capital municipal, aprobó ayer rescindir el contrato de la empresa adjudicataria de la gestión del palacio de congresos, La Llotja de Lleida SA, a partir del 28 de febrero, como había solicitado esta firma por la “inviabilidad económica” de la concesión (ver SEGRE de ayer). La decisión se adoptó, entre fuertes críticas de la oposición, con el respaldo de los representantes del PSC, PP y Mercolleida, mientras que CiU, C’s y ERC se abstuvieron y la Crida votó en contra. “Desde el 1 de marzo, el CNC asume la gestión directa del palacio de congresos, con apoyo del Lleida Convention Bureau y de Turisme de Lleida. Seguiremos contando con el personal de la Llotja y se garantizará la celebración de las actividades ya contratadas”, explicó el teniente de alcalde Rafael Peris. Asumirá los 8 trabajadores de la concesionaria y está por ver si se contrata o no a más. En cuanto a los servicios de restauración –hay un bar-restaurante en la planta baja y otro en la terraza– la previsión es sacarlos a concurso “lo antes posible” para que los gestione una empresa privada. Además, Peris insistió en que reclamarán la deuda acumulada por la concesionaria con el CNC, que asciende a unos 310.000 €, aproximadamente, por el impago del canon. Una vez se haya traspasado la gestión, se hará una inspección del estado del edificio y sus instalaciones y se valorarán las inversiones que ha hecho la concesionaria –el martes aseguró que suman 1,5 millones– para ver las implicaciones económicas que resultan. También se estudiará si corresponde alguna penalización por la renuncia a la concesión, que acababa en 2025.
El grupo del PDeCAT y Unió exigió una convocatoria extraordinaria del consejo de administración del CNC y una auditoría y criticó que el orden del día de la reunión de ayer no dijera nada de la rescisión del contrato. “Siempre que preguntamos por la gestión de la Llotja nos decían que no pasaba nada. Si la Llotja era la joya del modelo de ciudad de Ros, ahora tenemos la prueba palpable de que este modelo se hunde”, afirmó Toni Postius. Carles Vega (ERC) recordó que ya habían pedido la rescisión, criticó la falta de información y exigió también que durante este mes se reúna el consejo con un informe económico y un plan de actuación sobre la mesa. La Crida, que recientemente había denunciado irregularidades en la concesión, señaló que la inviabilidad económica de la Llotja “se sabía desde 2013” y sospecha de un “pacto de silencio” entre Paeria y empresa. Reclaman más información. Dolors López (PP) indicó que votaron a favor porque no hacerlo “hubiera obligado a cerrar la Llotja”, pero consideró que se trata de una solución “de emergencia y provisional” a la espera de un plan de viabilidad. El Comú reclamó más transparencia y participación.