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Salud ve 'algún riesgo' para el bebé si se da a luz en la bañera del Arnau
Defiende su uso durante el tiempo de dilatación de la madre para aliviar el dolor
La bañera de hidroterapia del Arnau fue inaugurada en 2009.
La bañera para partos naturales del Arnau de Vilanova instalada en 2009 se utiliza muy poco y, además, solo durante el tiempo de dilatación de la madre y no durante el nacimiento del bebé, “por riesgo de ahogo”. Así lo reconoce el departamento de Salud, que afirma que “la bañera la usa la madre en las primeras fases del parto, con el objetivo de mejorar el confort y reducir el dolor, hasta que la comadrona constata la culminación del periodo de dilatación”. Entonces, añade, “es trasladada fuera de la bañera para el parto, debido a que si el bebé fuera expulsado dentro de la bañera, aunque sería mínimo, podría haber algún riesgo de ahogo”. En una respuesta parlamentaria a una pregunta de C’s, el conseller de Salud, Antoni Comin, indica que “el método de hidroterapia en el Arnau no incluye la asistencia de expulsión en el agua, debido a que no se disponen de suficientes estudios que permitan garantizar la seguridad necesaria para la ejecución de esta fase”. Especifica también que la bañera se usa a demanda de la madre y que no hay reclamaciones en la unidad de atención al usuario por no haber satisfecho una petición.
De los 13.012 partos que hubo en el Arnau de Vilanova entre 2012 y el 4 de noviembre de 2016, 2.610 fueron por cesárea y 10.402, naturales. De estos últimos, en 52 casos la madre empleó la bañera de hidroterapia, lo que supone un exiguo 0,49% de todos los partos naturales. En concreto, en el año 2012 se utilizó en catorce ocasiones, en seis en 2013, en ocho en 2014, en diecisiete en 2015 y en siete en 2016.
