Los médicos que ofrecen terapias alternativas se han doblado en 5 años

No hay término medio con las llamadas terapias alternativas. O levantan pasiones a ultranza o críticas furibundas. Son una tendencia al alza, aunque los propios médicos que las ejercen reconocen que no pueden demostrar científicamente su validez. Las últimas polémicas han girado en torno a Fira Natura y a unos cursos de la UdL.

El Colegio de Médicos de Lleida tenía acreditados en 2012 a 34 homeópatas, acupuntores y naturistas. Ahora son unos sesenta profesionales los que ejercen en la demarcación, casi el doble. “Son licenciados en Medicina”, subraya el presidente de la entidad, Ramon Mur. Un matiz que puede ser vital. “Cuando se traslada un problema de salud a una persona no formada puede suponer, en el mejor de los casos, una pérdida de oportunidad en salud o, lo que es lo mismo, el empeoramiento del pronóstico de una enfermedad como consecuencia de la demora excesiva o inadecuada en su estudio, diagnóstico y tratamiento”. Mur insiste en que solo un médico puede diagnosticar. “Una infección de orina o una alteración del ritmo intestinal persistente puede enmascarar una afección mucho más grave. Una vez realizado el diagnóstico es cuando el paciente, debidamente informado sobre las opciones terapéuticas y su evidencia científica, puede elegir”.

El presidente del Colegio de Médicos señala que actualmente el intrusismo por personal no sanitario existe. “Recibimos quejas que derivamos a Sanidad”, asegura. En el departamento son lacónicos. No tienen cuantificadas las quejas o denuncias relacionadas con las terapias alternativas y se limitan decir que “cuando pueden tener relación con el intrusismo profesional, se investigan y si se pueden verificar las prácticas denunciadas se da traslado a fiscalía, dado que el intrusismo profesional está tipificado como delito en el Código Penal”. Sin embargo basta con hacer una búsqueda en las Páginas Amarillas. Cruzando “homeopatía” y “Lleida” salen médicos titulados, farmacias que venden productos homeopáticos, pero también centros de belleza y tiendas de dietética. “Hay un intrusismo consentido”, denuncia Eva-

Reclaman el uso terapéutico de la marihuana en la salud pública Un debate muy vivo en los últimos años en la sanidad catalana plantea si esta debería incoporar el uso terapético de la marihuana, como sostienen algunas asociaciones. En Ponent, uno de los principales protagonistas de esta reclamación es el activista de Balaguer Josep Pàmies, quien se enfrenta a una petición de 2 años de cárcel por parte de la Fiscalía por la producción de marihuana que el agricultor asegura que es para uso terapéutico. En la última Fira d’Alimentació i Salut de Balaguer, celebrada en octubre pasado, Pàmies dijo no tener miedo a entrar en prisión por esta causa. El activista participó en un acto junto a Pau Donés, cantante de Jarabe de Palo, quien explicó su lucha contra el cáncer a través de un cambio en la alimentación y el uso de plantas con propiedades medicinales. Algunas de las charlas programadas en esta Fira congregaron a 800 personas. Está claro que la terapia alternativa tiene adeptos.