Plan para detectar antes a alumnos con altas capacidades

La Universitat de Lleida (UdL) y la Fundación para la ayuda a niños y jóvenes con altas capacidades (Fanjac) sellaron ayer un convenio para fomentar una detección precoz de los estudiantes que las tienen, un colectivo cuyos miembros a menudo se sienten excluidos del sistema educativo al no ser correctamente diagnosticados o al no recibir una educación de acuerdo a sus necesidades. De hecho, ambas instituciones ya han organizado dos sesiones de formación este año para familiares y futuros docentes.

“En Catalunya, solo un 0,2% de los niños y jóvenes están diagnosticados con altas capacidades, mientras que Enseñanza estima que alrededor de un 5% de los estudiantes son superdotados o con múltiples talentos y expertos internacionales ascienden esta cifra al 15%. Queda mucho camino por recorrer, necesitamos identificarlos durante las etapas de Infantil o Primaria para poder intervenir y diseñar un plan individualizado y evitar, así, el fracaso escolar”, explicó ayer Martí Sans, presidente de Fanjac. Por su parte, el rector de la UdL, Roberto Fernández, señaló que es “un orgullo y una obligación” hacer frente a esta problemática. “Queremos garantizar que los alumnos con altas capacidades que lleguen a la UdL no sufran ninguna discriminación”, señaló. También apuntó que se forma a los docentes de la universidad en este sentido y que se llevarán a cabo investigaciones en esta línea.