Pide que apliquen a su hijo trabajos comunitarios por hacer ‘botellón’

Un padre de Lleida ha iniciado una campaña para que los menores multados por consumir alcohol en la calle puedan “resarcir” su conducta mediante trabajos comunitarios y no con una simple multa. La iniciativa surge después de que su hijo fuera interceptado por la Urbana cuando hacía ‘botellón’ con un grupo de amigos en Cappont. La acción incívica se saldó con una multa de 60 euros, que el padre no ve correcta al entender que poco enseña a los menores del riesgo que supone el consumo de alcohol. “La sanción la acaba pagando papá y el menor no aprende nada. El castigo debe ir por otro camino”, explica a este diario. Otros padres apoyan esta iniciativa, que pasa por aplicar la ley del Menor en la que se incluye la posibilidad de que estas infracciones se multen con trabajados en beneficio de la comunidad. “Si pasan un día limpiando vasos tirados en el suelo aprenderán más la lección que si solo les aplican una multa”, señala este progenitor.

Primero se dirigió primero a la Paeria para que le aplicaran la ley del Menor, a lo que el ayuntamiento contesta, en su escrito de alegaciones, que hasta ahora la normativa permitía aplicar estas tareas, pero que una sentencia del Tribunal Superior de Justicia las prohibió en caso de incumplir la ordenanza de civismo. Las tareas socioeducativas sí se ofrecen a los menores, sin embargo, si se les intercepta con drogas. Pero este vecino de Lleida no se quedó aquí. Acudió al Síndic de Greuges, al que presentó una queja en la que reclama que se le apliquen trabajos comunitarios a su hijo en lugar de una multa, que ha pagado para beneficiarse de un descuento en la cuantía final. Según este padre, que comparte opinión con otros progenitores cuyos hijos también han sido multados, hay que actuar ante el consumo de alcohol más allá de “pillar” a los adolescentes, por lo que pide controlar los establecimientos que venden bebidas alcohólicas a los menores.