Una niña de Balaguer, primera víctima en Lleida del juego de la “Ballena Azul”

Una niña de 12 años de Balaguer ha denunciado esta semana ante los Mossos d’Esquadra haber sido víctima del macabro juego de la “Ballena Azul”, en la que los adolescentes tienen que pasar hasta 50 peligrosas pruebas que pueden acabar en suicidio. El de Ponent es uno de los seis casos detectados hasta ahora en Catalunya.

El peligroso juego virtual de la “Ballena Azul” ya ha llegado a las comarcas leridanas. Los Mossos d’Esquadra han recibido esta semana la denuncia de una niña de 12 años de Balaguer que habría sido víctima de una página web que incita a los adolescentes al suicidio tras pasar 50 peligrosas pruebas. Según confirmaron ayer fuentes policiales, se han recibido seis denuncias en Catalunya en Balaguer, Santa Coloma de Gramenet, Terrassa, Sabadell y Girona. En el caso de la Noguera, es la víctima más joven detectada hasta ahora y es la última de la que se tiene constancia. Asimismo, se investigan otros posibles casos.

La menor de Balaguer entró en dicha página web por curiosidad, pero que, cuando vio el tipo de instrucciones que se le daban y que podrían poner en riesgo su vida, se lo contó a sus padres y se dirigieron a dependencias policiales a interponer la denuncia. Se trataría de un contacto muy inicial que no habría llegado a extremos como uno detectado en Terrassa, donde la menor está ingresada en la unidad de psiquiatría del hospital Parc Taulí de Sabadell.

Los investigadores están tratando de localizar al administrador de esta página, que podría ser investigado por un delito de inducción al suicidio. Para ello, están en contacto con otros cuerpos policiales para rastrear el circuito y contactar con otras investigaciones. Desde Enseñanza, se ha activado los protocolos para evitar nuevos casos. Los Mossos recuerdan que trabajan de forma continua con colegios, familias y organismos públicos para promover una internet segura, conferencias en las que se incluye este juego. Sin embargo, recalcan que es necesaria una mayor implicación de los padres, ya que son ellos los que deben alertar de cualquier conducta extraña de sus hijos. La Policía insiste en que se no se trata de un juego y que la inducción al suicidio puede comportar penas de prisión de entre 4 y 8 años. Por su parte, la consellera de Enseñanza, Meritxell Ruiz, instó a denunciar porque hay acoso y amenazas. Para combatirlo, apostó por el diálogo y la educación, y llamó a los padres a estar en alerta ante cualquier actitud sospechosa.