SEGRE
Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.SEGRE

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Las escuelas rurales tienen un gran peso dentro del sistema educativo catalán y aún más en Lleida. Òmnium Alt Urgell organizó hace unas semanas la exposición itinerante “Les escoles rurals”, que refleja su evolución en el Alt Urgell durante las últimas décadas. El historiador y técnico del consell comarcal Carles Gascón, que participó en su preparación, recuerda que la pérdida de población que sufrieron a partir de mediados del siglo XX los núcleos más alejados de las capitales de comarca obligó al cierre de decenas de escuelas. Fueron años de lucha por la continuidad de la escuela rural, un modelo educativo, destaca, por el cual se han dejado la piel muchos padres y madres, profesores, y alcaldes de pueblos que se han resistido a perder un servicio básico como este para la educación de sus pequeños.

La constitución de las primeras Zonas Escolares Rurales (ZER) en 1988 marcó un punto de inflexión en lo que parecía una decadencia casi imparable, al dignificar la escuela rural y abrir nuevas perspectivas de trabajo en equipo para los docentes y la posibilidad de acceder a mejores servicios y recursos educativos. En el Alt Urgell fue decisiva la figura de la profesora Rosa Campà, que promovió la creación de la ZER Batllia-Baridà integrando los centros de la Cerdanya leridana de Montellà, Martinet, Prats, Prullans y Lles. Poco después le siguió la ZER Urgellet, con las escuelas del norte del Alt Urgell (Montferrer, Castellciutat, Arfa, Adrall, El Pla de Sant Tirs, Alàs, Arsèguel y desde el 2012 la de Tuixent). En el curso 1992-93 se constituyó la ZER Narieda con las de Alinyà, Fígols, Organyà, Coll de Nargó y Peramola. Precisamente, la muestra “Les escoles rurals” rindió homenaje a Rosa Campà, que después de ser maestra en Montellà se trasladó a Montferrer, donde acabó su carrera profesional. Esta escuela lleva su nombre en recuerdo de su figura, no solo por lo que hizo por el centro, sino por toda la escuela rural del Pirineo. La exposición detalla que “conceptos que hoy en día están tan de moda y que los expertos consideran innovaciones educativas como el aprendizaje competencial o la construcción colaborativa del conocimiento, ya eran aplicados hace años por Rosa Campà y las difundió entre sus compañeros hasta convertirlo en un modelo de éxito”.

Una muestra homenajeó a Rosa Campà, una figura clave en la escuela rural del Pirineo

Este curso, el Alt Urgell cuenta con 8 escuelas rurales con 294 alumnos. La ZER Urgellet integra las de Alàs (4 alumnos), Castellciutat (24), Montferrer (79), El Pla de Sant Tirs (52) y Tuixent (9). Por su parte, la ZER Narieda incluye las de Organyà (72 alumnos), Coll de Nargó (39) y Peramola (14).

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.SEGRE

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.SEGRE

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.SEGRE

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.SEGRE

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.SEGRE

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.

Los alumnos de la escuela Creu del Batlle, de la ZER l’Horta de Lleida, en el patio.SEGRE

tracking