Quejas por obras de la UdL junto a la biblioteca de Medicina en exámenes

Los estudiantes de Medicina, como los del resto de la Universitat de Lleida, están de exámenes, pero las obras de construcción de una puerta de emergencia junto a la biblioteca provocan ruido y vibraciones que les dificultan tanto el estudio que han comunicado su indignación al decanato. “Esto no es viable ni para estudiar ni para la salud. Ya entendemos que esta obra hace falta pero, ¿a quién se le ocurrió que había que hacerla ahora, en plenos exámenes?”, indicó una estudiante de Medicina. Remarcó que el precio de matrícula que pagan es muy caro y que muchos alumnos se están jugando “no solo el curso, sino la carrera”. Otro alumno señaló que se ven obligados a ponerse auriculares con música para intentar mitigar el ruido y añadió que “cuando taladran, vibra todo”. Las obras comenzaron hace un par de semanas y también están afectando a algunas clases, apuntaron los estudiantes, que propusieron postponer los trabajos de adecuación de la puerta de emergencia hasta julio.

Por su parte, la decana de Medicina, Rosa Soler, señaló que el equipo rectoral de la UdL no le comunicó cuándo abordaría esta obra ni tampoco su envergadura. Consideró que si hubieran sido informada podrían haber buscado una solución y evitar molestias a los alumnos. En cambio, el decano de la facultad de Enfermería y Fisioterapia, Joan Blanco, dijo que “es cierto que se oye ruido alguna vez, pero no dificulta el normal funcionamiento de nuestro centro”.

El vicerrector de Campus, Jesús Avilla, aseguró que tuvo conocimiento de las quejas este mismo miércoles, admitió que los estudiantes “tienen razón” y pidió disculpas públicas por la situación generada. “Es una obra que depende de un concurso y sus plazos, y no pudimos planificar su inicio con exactitud, pero hemos fallado en no haber avisado (a la facultad) ni buscado una solución alternativa”, reconoció. Afirmó que los trabajos no se pueden paralizar ahora, pero anunció que destinarán otros espacios del campus de Ciencias de la Salud como aulas de estudio alternativas a la biblioteca. “Estamos intentando compactar la docencia para dejar aulas libres en las que puedan estudiar”, explicó.