Recta final para abrir el parador del Roser

La adecuación del antiguo convento del Roser de la calle Cavallers como parador nacional de turismo está al fin en la recta final. Operarios descargaban este miércoles mobiliario y elementos de decoración para las habitaciones, como somieres, sillones, mesas y percheros, pero la dirección del parador afirmó que todavía no han fijado una fecha para la apertura.

Recientemente, el alcalde aseguró que entraría en servicio antes del verano. En todo caso, los sucesivos plazos anunciados por el Estado han sido rebasados. Los últimos fueron entre enero y febrero de este año y, al quedar sobrepasado, después de Semana Santa. La obra civil quedó terminada en noviembre del año pasado (se inició en marzo de 2010, pese a que ya fue presentado en 2005) y desde entonces se ha ido adjudicando a diferentes empresas el suministro de equipamiento de cocina, mobiliario y decoración, y también iluminación y accesorios de baño.

En total, la inversión en el parador alcanza los 12,9 millones, ya que fue adjudicado por 11,6, pero hay que sumar 700.000 euros del equipamiento. Tiene 53 habitaciones dobles situadas alrededor del claustro, que ha sido cubierto y acogerá la sala de estar y la cafetería.