Pruebas de aptitud para aspirantes a maestro

Cerca de trescientos alumnos que quieren cursar grados de Educación se han enfrentado hoy en el edificio polivalente del campus de Cappont de la Universitat de Lleida a la nueva prueba de aptitud personal, que por primera vez se separa de la selectividad y que evalúa por un lado su competencia comunicativa y razonamiento crítico y, por otro, su competencia logicomatemática. Los estudiantes se considerarán "aptos" si obtienen una media aritmética de ambos exámenes igual o superior a cinco puntos sobre diez, siempre que cada uno tenga una nota mínima de cuatro.

La primera prueba ha constado de una parte de comprensión lectora de un texto de Umberto Eco sobre la mentira, otra centrada en la expresión escrita en la que los aspirantes a maestro han tenido que redactar un texto de trescientas palabras y otra en la que tenían que corregir errores ortográficos. En el segundo examen, han tenido que ordenar cifras de menor a mayor, continuar secuencias, convertir medidas y también elaborar y analizar gráficos.

Alumnos consultados han considerado que el nivel ha sido asequible y ven bien estas pruebas adicionales para los grados de Educación. No obstante, algunos han criticado que hasta marzo no se les comunicó que deberían hacer estos exámenes y otros han denunciado que tengan un coste añadido (95 euros, han asegurado) y que deban hacerlos sin saber la nota de selectividad, hecho que perjudica a los que no han escogido carreras de Educación en primera opción.