Condenan a un preso de Lleida por una brutal paliza a otro interno

La Audiencia Provincial de Lleida ha condenado a un año y medio de prisión a un interno del Centre Penitenciari Ponent por una brutal paliza a un compañero. A consecuencia de los golpes, la víctima sufrió una fractura nasal, la pérdida de un diente y otras contusiones de las que tardó 55 días en recuperarse. El tribunal ratifica la sentencia de primera instancia del juzgado de lo Penal número 2 de Lleida que lo consideró culpable de un delito de lesiones y desestima el recurso presentado por la letrada del acusado. A su vez, la jueza absolvió a la víctima, también acusada de un delito de lesiones, al considerar que actuó en legítima defensa. La agresión tuvo lugar hace un año en la zona de duchas de la cárcel.

El interno condenado alegó en su recurso que no fue una agresión sino que ambos se enzarzaron en una discusión que acabó en una pelea y que actuó en legítima defensa. Sin embargo, tanto la jueza de lo Penal como ahora el tribunal determinan que “tras iniciarse una discusión, el acusado procedió a lanzar golpes y puñetazos contra el otro interno, que intentó defenderse lanzándole a su vez algún golpe”. A consecuencia de la agresión, el otro recluso sufrió la fractura nasal, la pérdida de un diente (incisivo superior), erosiones en el tórax y la rotura del tendón de un dedo de la mano derecha, según la sentencia, lo que le supuso tratamiento médico y ortopédico en unas lesiones de las que no quedó totalmente recuperado hasta casi dos meses después. El agresor sufrió erosiones leves.

La víctima, que también estaba acusada, fue absuelta al considerar que se defendió de la agresión

La Audiencia Provincial también considera clave la intervención del funcionario de la cárcel, que en el juicio declaró que la víctima siempre mantuvo que había sido agredido y que intentó defenderse, presentando varias lesiones mientras que el ahora condenado apenas tenía marcas. Por todo ello, el tribunal desestima el recurso al “descartar una posible legítima defensa”. La sentencia es firme y no se puede recurrir.

Aumentan las agresiones en las prisiones catalanas ? La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denunció el pasado julio un alarmante aumento de las agresiones en las cárceles catalanas y reclamó que se tomen medidas urgentes y se desarrolle el protocolo de agresiones ante la llegada de un nuevo perfil de preso, menos respetuoso con el funcionario. Sin embargo, en el Centre Penitenciari de Ponent, según datos del mismo sindicato, el número de agresiones ha descendido este año respecto 2016. Concretamente, en el primer semestre solo un funcionario resultó agredido por los diez del mismo período del año pasado. En cuanto a las tentativas, este año se han producido dos, las mismas que en 2016. El CSIF también reclama que se sustituyan las bajas y jubilaciones que actualmente no se cubren.