Suspenden un juicio en el Canyeret por un despido porque estaba señalado para 2071

El juzgado de lo Social número 2 de Lleida suspendió el pasado miércoles un juicio por un supuesto despido improcedente porque estaba señalado para el año 2071. Concretamente, estaba fijado para el 6 de septiembre de 2071. El error tipográfico ha hecho que las partes, que ya habían esperado cuatro meses para celebrar la vista, tengan que esperar ahora cuatro meses más para tener una nueva fecha de juicio. La denunciante explicó a SEGRE que se personó en los juzgados del Canyeret con su abogada. Cansadas de esperar su turno, preguntaron a los funcionarios si tardarían mucho en llamarlas. Su sorpresa fue mayúscula cuando les dijeron que su juicio no figuraba en la lista de señalamientos del día. Al comprobarlo, se percataron del error. Estaba fijado para dentro de 54 años. El error hará que tenga que fijarse una nueva fecha de juicio, con la correspondiente espera, de una media de unos cuatro meses en el juzgado de lo Social.

Los juzgados de Lleida acumulaban a finales del año pasado 5.322 asuntos en trámite, unos 300 menos que a principios de 2016, cuando eran 5.676, según la estadística del Poder Judicial. En total, el año pasado el partido judicial de Lleida ingresó 21.993 nuevos asuntos. Según fuentes del Colegio de la Abogacía de Lleida, que transcurran entre cuatro y seis meses de demora para celebrar un juicio se considera un hecho “habitual”. En el Canyeret, el juzgado que acumula un mayor retraso actualmente es el Contencioso-Administrativo, que señala juicios para dentro de más de un año. Le sigue el de Familia, con retrasos también importantes, y los partidos judiciales de Balaguer y Cervera, que están fijando asimismo juicios para dentro de un año. En Balaguer, el pasado mayo se juzgó una reclamación que entró en primera Instancia en 2010.

Juicio por una estafa en la compra de un piso de hace 14 años La Audiencia de Lleida acogió ayer un juicio por una estafa que se produjo hace ahora casi 14 años. Un retraso que las defensas de los tres acusados quieren utilizar para que sus clientes queden exentos de responsabilidad alegando que los hechos ya están prescritos. Según la Fiscalía y la acusación particular, la víctima abonó más de 13.500 euros como paga y señal para la compra de un piso en La Bordeta que ya habían vendido a otra persona el día anterior. Las dos acusaciones solicitan una pena de prisión de cuatro años para cada uno de los acusados por un delito de estafa o de apropiación indebida. Sin embargo, las defensas consideran que ha prescrito. Durante estos 14 años, el juicio se ha señalado otras dos veces, pero se tuvo que suspender al no localizarse a uno de los acusados.