Más de 600 firmas para reabrir al tráfico Bisbe Ruano en Ricard Viñes

Comerciantes de Bisbe Ruano han recogido por el momento más de seiscientas firmas a favor de reabrir al tráfico el tramo peatonal de esta calle y conectarla con la rotonda de Ricard Viñes. Afirman que desde la peatonalización de la plaza (estrenada en el año 2010) soportan problemas de movilidad y de conexión con otras zonas de la ciudad y critican también el impacto visual de las estructuras de acceso al aparcamiento subterráneo, que consideran desproporcionadas. “Visualmente, los ‘mamotretos’ (nombre con el que se conocen estas estructuras) cierran la plaza. Parece que allí se acaba Lleida y las terrazas ni siquiera se llenan”, sobre todo las de Bisbe Ruano, indicó una promotora de la campaña, y añadió que tienen previsto reactivarla después del verano y continuarla hasta finales de año. Para unir sus dos reivindicaciones, proponen una conexión de Bisbe Ruano con la rotonda reduciendo el volumen de la estructura del parking. De todos modos, reconoció que hay vecinos a los que sí les agrada la plaza. Los impulsores de la iniciativa destacaron que con el diseño actual los vehículos tienen que dar una gran vuelta y los vecinos de edad avanzada de la parte peatonal de Bisbe Ruano “tienen que ir hasta Ronda o Balmes para coger el autobús”. En este sentido, recordaron que el proyecto inicial de reurbanización de Ricard Viñes planteaba un carril semipeatonal que conectaba Ruano con Balmes.

La petición cuenta con el apoyo de la asociación de comerciantes de la Zona Alta, tal como corroboró ayer su presidente, Josep Bellera, aunque matizó que la entidad no organiza la recogida de adhesiones. “La asociación apoya totalmente la petición. Gran parte de nuestros socios son de Bisbe Ruano y la defienden. Pero no somos los promotores”, remarcó. En todo caso, Bellera consideró que el diseño actual “ha hecho mucho daño al comercio” de esta zona.

La asociación de comerciantes de la Zona Alta apoya la iniciativa, pero no promueve la recogida

Por su parte, el teniente de alcalde Fèlix Larrosa dijo no conocer “ni la iniciativa ni qué piden” los comerciantes de Bisbe Ruano. Además, apuntó que tampoco conoce los estudios de movilidad que en su momento llevaron a este diseño en concreto de la plaza Ricard Viñes. Cuando los comerciantes anunciaron su intención de recoger firmas, la Paeria ya indicó que modificar esta zona no es fácil desde un punto de vista técnico, debido a que la plaza consta de muchos elementos y remarcó que el objetivo de su remodelación fue precisamente ganar espacio para los peatones.

Un diseño de Tagliabue con defensores y detractores La ‘nueva’ plaza Ricard Viñes fue inaugurada en 2010, después de dos años de obras, que provocaron incomodidades a comerciantes y vecinos. La remodelación tenía como principal objetivo ganar siete mil metros cuadrados de superficie peatonal, a costa de cerrar al tráfico el tramo inicial de las calles Bisbe Ruano y Fleming. No obstante, el proyecto inicial de reurbanización de la plaza sí preveía conectar Bisbe Ruano con Balmes con un carril semipeatonal por el lateral de la plaza, aunque al final no se hizo. De hecho, el diseño de la plaza, obra de la arquitecta italiana Benedetta Tagliabue, ha tenido tanto defensores como detractores desde su estreno. Por ejemplo, los accesos al parking construido bajo la plaza generaron polémica desde el principio, por su gran volumen, hasta el punto que son conocidos por comerciantes y vecinos de la zona como los ‘mamotretos’. Otras quejas han sido la incomodidad de los bancos o el césped en forma de laberinto, que nunca llegó a enraizar bien y al final tuvo que ser sustituido por hormigón de color verde. La arquitecta dijo en su día que con su diseño buscó crear “muchos espacios distintos para actividades diferentes, desde el parking a las zonas para niños, para pasear, encontrarse y charlar o estar en las terrazas”.