VIVIENDA MERCADO
Un banco vende 205 viviendas en Lleida por menos de 50.000 euros
Los pisos más baratos cuestan menos de diez mil euros y están muy deteriorados
Imagen de archivo de carteles de venta de pisos en Lleida.
Comprar un piso desde 2.865 euros. Este es el precio mínimo que ofrece la inmobiliaria Anida, filial del BBVA, por un piso de 55 m² en una casa centenaria de la plaza del Dipòsit dentro de la campaña que ha puesto en marcha para vender parte de su patrimonio inmobiliario con peor salida en el mercado. Las viviendas más baratas, con precios por debajo incluso de diez mil euros, están, más que a reformar, a rehacer casi por completo, ya que se encuentran muy deterioradas y están en zonas con escaso atractivo.
La campaña busca vender 2.500 viviendas por menos de 50.000 euros en toda España y con descuentos importantes, que en algunos casos llegan a un tope del 60%. Lleida es la cuarta provincia con más inmuebles incluidos en esta campaña, un total de 205, por detrás de Valencia (357), Tarragona (227) y Barcelona (214). La mayoría se encuentran en la capital (91), aunque también hay 17 en Mollerusa, 11 en Balaguer y 11 en Tàrrega, entre muchas otras poblaciones. Entre las de mayor valor hay también alguna promoción seminueva, como una de apartamentos en Llívia construida en 2010, aunque aquí los precios ya rondan los cuarenta mil euros.
El director comercial de la unidad inmobiliaria de BBVA, Pablo Lafarga, aseguró que la compañía quiere aprovechar la situación actual de la economía española, con la mejora del crecimiento, el mercado laboral y el acceso al crédito, para lanzar esta promoción a unos precios “más competitivos”.
No es la primera que una entidad financiera pone en marcha una campaña de este tipo para intentar dar salida al gran stock de productos inmobiliarios que ha acumulado como consecuencia de los embargos por la crisis económica.
La compraventa creció un 3,6% en la provincia durante julio ? La compraventa de viviendas sigue su senda al alza, aunque en julio, según los datos hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística, moderó su crecimiento. En el caso de Lleida, durante ese mes se vendieron 285 viviendas, un 3,6% más que un año antes. En lo que va de 2017, el crecimiento es de un 6%, por debajo del ritmo del año pasado, cuando las ventas crecieron un 15%. El mercado sigue completamente dominado por los pisos de segunda mano, que supusieron un 86% del total de operaciones. De hecho, las ventas de pisos nuevos bajaron en julio un 11%, aunque las cifras son muy pequeñas.
