El juez envía a prisión al detenido en Pardinyes acusado de yihadista

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz decretó ayer prisión provisional y sin fianza para el joven de origen pakistaní detenido el martes en la calle Pere de Cavasèquia de Pardinyes por haber alcanzado supuestamente un nivel de “máxima radicalización” a través del consumo y difusión de propaganda yihadista en internet. El arrestado, que responde a las iniciales A.Z., pasó durante la mañana a disposición judicial, pero se negó a declarar, al igual que lo hizo en sede policial. No obstante, el magistrado, siguiendo el criterio de la Fiscalía, le envió a prisión acusado de un delito de autoadoctrinamiento.Al parecer, el detenido consumía y difundía, a través de sus perfiles en Facebook, mensajes yihadistas centrados en la justificación y el llamamiento explícito a la yihad armada, vídeos en los que se inducía al martirio, alabanzas a terroristas, así como abundante material propagandístico animando a la realización de acciones terroristas. Según informan fuentes fiscales, del análisis del teléfono incautado en su domicilio durante el registro practicado tras su detención, se extrajeron imágenes y mensajes que permiten concluir que era una persona radicalizada mediante autoadoctrinamiento por redes sociales. Igualmente guardó audios cuyas letras suponen una incitación y llamamiento a hacer la yihad así como al enaltecimiento de la figura del martirio.

En las últimas semanas, los investigadores constataron la radicalización máxima de este individuo, que mostraba un importante retraimiento social y había descuidado sus obligaciones laborales para centrarse en la práctica rigurosa de los preceptos religiosos y al consumo de material radical. Fuentes de la investigación resaltaron la importancia del desmantelamiento definitivo, ya que los pakistaníes conforman agrupaciones muy cerradas en las que resulta difícil penetrar.

Huyó a Pakistán al ser arrestados tres hermanos, pero regresó El detenido convivió con tres hermanos que también fueron arrestados en el mismo lugar en julio del año pasado por presunta actividad yihadista. Fue ahí cuando se puso de manifiesto la existencia de una estructura radical de origen pakistaní encabezada por los tres hermanos que habrían participado en el proceso de adoctrinamiento del detenido. Este, ante el temor de ser también arrestado, viajó a Pakistán, aunque regresó a España en mayo de este año. Además optó por mantener un perfil bajo en las redes sociales, pero se le incautó un libro de carácter fundamentalista religioso en el que se maldice a las mujeres que no están casadas o que usan maquillaje y joyas. El documento requisado también hace referencia a la muerte y su preparación y a las obligaciones de todo musulmán. Resaltan que estaba señalado un capítulo que habla del juicio final en la muerte y del viaje al paraíso.