Seguimiento desigual de la protesta en los bancos

El seguimiento a la iniciativa de ANC y Òmnium de sacar dinero de los bancos a modo de protesta fue desigual. En algunas sucursales si se notó más afluencia de clientes, pero en otras el volumen de personas que acudió a sacar dinero fue el habitual de un viernes. En el caso de la ciudad de Lleida, no llegaron a formarse colas fuera de lo común. En cambio, en Tàrrega, sí que llegaron a ser notables en algunas sucursales. El vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro, calificó de “notable” el seguimiento a la iniciativa, en la que se pedía a los ciudadanos ir a “uno de los cinco principales bancos” (Banc Sabadell, CaixaBank, Santander, Bankia, y BBVA) y retirar una cantidad en efectivo, emitiendo una queja si es una de las entidades que han sacado su sede social fuera de Catalunya, para después gastar el dinero en lo que consideren. Pidieron que la gente acudiese a primera hora para que la acumulación de clientes fuera más evidente.

La protesta no fue bien recibida por todos los líderes independentistas. El conseller de Empresa, Santi Vila, consideró que estas acciones “no son la mejor manera de hacerse oír”. La coordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal, dijo a las entidades soberanistas que con su dinero, “cada uno haga lo que quiera”. Para la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, llamar a la gente a retirar dinero de los bancos “no es la mejor idea” porque incrementa la incertidumbre económica. Y desde el PP ironizaron con usar el dinero para pagar la multa a Artur Mas por el 9-N.