Treinta y cuatro centros de Lleida crean una red para fomentar la innovación educativa

Un total de 34 centros de Primaria y Secundaria de Lleida han creado una red de colaboración para impulsar el nuevo modelo de aprendizaje por competencias básicas. Unos ochenta profesionales de estos centros celebraron el viernes una reunión para compartir sus experiencias. Francesc Blanch, jefe de servicios educativos y formación permanente de Enseñanza en Lleida, indicó que esta red de centros constituye una vanguardia de la innovación educativa. “Es un laboratorio de prácticas de modelos innovadores en enseñanza competencial con un esfuerzo compartido”, señaló.

Blanch explicó que esta red se ha creado a partir de la confluencia del proyecto de Escola Nova 21 promovido por la Fundació Bofill y la Fundació La Caixa y otro que Enseñanza puso en marcha hace quince años para fomentar el trabajo por competencias. Los centros cuentan con el apoyo de expertos de diferentes universidades para el desarrollo de esta metodología en las diferentes áreas, como por ejemplo matemáticas, lenguas o ciencias. Asimismo, en cada uno de ellos hay un equipo impulsor de la nueva metodología formado por dos o tres docentes.

Se trata de un “laboratorio de prácticas” de modelos de enseñanza alternativos a los tradicionales

Esta red cuenta ahora con 34 centros: veinte escuelas públicas de Primaria, tres zonas escolares rurales (ZER), nueve institutos, el nuevo instituto-escuela de Torre Queralt en el Secà de Sant Pere, y un centro concertado de Primaria y Secundaria de Les Borges Blanques. Casi la mitad de ellos, 15, son de Lleida ciudad y el Segrià, pero todas las comarcas, salvo el Alt Urgell, están representadas.

Blanch subrayó que este modelo educativo “reinventa el enfoque clásico de la escuela porque su centro pasa a ser el trabajo de cada alumno”, en lugar de basarse en el profesor y las materias. En esta línea, puso como ejemplo que en matemáticas, en lugar del aprendizaje tradicional de las diferentes operaciones, en lo que respecta a la aritmética, el objetivo es que, entre otras cuestiones, el alumno sepa cómo plantear y resolver un problema. En este sentido, recordó que Enseñanza ya implantó en 2015 un currículum basado en competencias básicas en Primaria y el pasado año hizo lo propio en Secundaria. Añadió que la colaboración entre los distintos centros “permite aprender entre todos a partir de la realidad de cada uno” para transformar el modelo escolar. Este proyecto se prolongará durante dos o tres cursos y sus resultados servirán como base para generalizar este modelo educativo.

Por otra parte, el instituto Joan Oró acogió ayer la jornada Xarxa Tranformadora de l’Educació a les Terres de Ponent, que tenía previsto comenzar con la conferencia “La falsa tensió entre matèries i competències en el treball per projectes. Óssos formiguers, pernils i rock’n roll”, a cargo de Sergi del Moral y Jordi Domènech.