Las multas de radar, a partir de los 60 km/h y no a 65 dentro de un mes

La Paeria prevé que en un mes los radares de la ciudad multen ya a los vehículos que circulen a más de 60 kilómetros por hora, cuando ahora lo hacen a partir de los 65 km/h.

“Solo falta que la concesionaria y la Urbana fijen la nueva velocidad a corto plazo, más o menos en un mes”, informó ayer el alcalde, Àngel Ros, después de pasar revista a la Guardia Urbana con motivo de los actos de celebración de Santa Cecília, patrona del cuerpo policial.

La decisión de la Paeria ha sido tomada después de que la jefatura de la Policía Local recomendara fijar en 60 km/h la velocidad mínima para multar por el repunte de accidentes con heridos y el aumento de los pequeños choques. “Hemos transmitido el informe de la Urbana a la concesionaria de radares para que lo pueda poner en marcha”, explicó Ros. Así pues, se prevé que se implemente después de anunciarlo a la ciudadanía.

El alcalde reiteró que el único objetivo es disminuir los accidentes y “la única diferencia de un choque con heridos o no es la velocidad”.

Desde que entraron en servicio de los radares fijos el 19 de agosto de 2014, los accidentes con heridos han bajado sustancialmente, ya que han pasado de los 388 de 2013 a los 210 del pasado año, un 45,87% menos lo que, según la Urbana, demuestra que han sido una medida “acertada” de cara a la mejora de la seguridad viaria.

Con la reducción a 60 km/h de la velocidad a la que multan, los radares de la Paeria se acercan al margen de tolerancia que la Dirección General de Tráfico aplica en los suyos en vías limitadas a 50, ya que sancionan a partir de los 58 por hora.

La concesión a la empresa UTE Sice-Arnó, de los radares y los semáforos con cámara termina en marzo y Ros precisó que aún no han decidido si la prorrogará o la sacará a concurso. Hay nueve radares fijos aunque solo funcionan tres y otro móvil.

oposiciones a cinco plazas de urbano y más rango para los jefes

El alcalde anunció ayer la convocatoria de oposiciones para cinco plazas de agentes en lugar de las dos habituales en los últimos años, y cinco más de promoción interna (dos de sargentos y tres de mandos superiores). Ros aseguró que “la Urbana se refuerza, que es lo que necesita ahora tras un periodo difícil económicamente”.

Según la información facilitada por diversas fuentes del cuerpo, la promoción interna de los mandos comportará que el máximo responsable de la Guardia Urbana, que ahora ostenta el cargo de intendente, gane un escalafón y pase a ser intendente mayor -algo habitual en ciudades incluso más pequeñas- mientras que uno de los inspectores pasará a ser subjefe. Además, se convocará otra plaza de inspector. No obstante, mientras unas fuentes indicaron que todo apunta a que las dos primeras están previstas para el actual intendente y uno de los dos inspectores, otras indicaron que se cubrirán mediante una oposición de acceso libre. Por su parte, la Paeria se limitó a señalar que las plazas de promoción interna “mayoritariamente serán de concurso-oposición libre”. Asimismo, representantes sindicales criticaron que solo se convoquen 5 plazas de urbano y se refuerce el escalafón de mando, y afirmaron que era prioritario convocar al menos 10 plazas de agente. Por Santa Cecília, patrona del cuerpo, el alcalde entregó 110 galardones a agentes y entidades por su profesionalidad.