La llegada de alumnos extranjeros a Lleida ciudad durante el curso se dispara

La llegada de alumnos extranjeros a los colegios de Infantil y Primaria de Lleida ciudad a lo largo del curso se ha disparado en los dos últimos años tras haber caído notablemente a raíz de la crisis. Han pasado de los 92 del curso 2014-15 a los 141 del 2016-17, un 53% más. Mientras, los procedentes del resto de Catalunya y España han bajado.

El “boom” inmigratorio de principios de siglo multiplicó no solo el número de alumnos extranjeros en las escuelas de Lleida, sino que el hecho de que muchos se incorporaran a lo largo del curso favoreció la formación de centros “gueto” al concentrarse en unos pocos colegios públicos con plazas libres, mientras que casi todos los concertados y algunos públicos eludieron su escolarización, lo que ha convertido a Lleida en una de las ciudades catalanas con mayor segregación escolar. Con la crisis, su llegada cayó en picado, pero en los últimos cursos ha repuntado con fuerza. Así, el número de alumnos extranjeros matriculados en escuelas de Lleida ciudad con el curso ya iniciado ha pasado de los 92 del 2014-15 a 141 en el 2016-17, un 53% más, según los datos de la oficina municipal de escolarización. En cambio, los procedentes del resto de Catalunya y de España bajan. Los primeros han pasado de 99 a 68 y los segundos, de 52 a 41.

Enseñanza anunció que este curso repartirá a los niños que lleguen entre todos los centros, independientemente de si tienen plazas vacantes o no (en este caso se aumentaría la ratio). Hasta ahora, los colegios debían reservar un número mínimo de plazas para alumnos con necesidades especiales, pero la obligación de pagar cuotas en los concertados o gastos de transporte y comedor en algunos públicos han hecho de que en media docena de escuela públicas más de dos tercios de los alumnos sean de origen extranjero. La responsable en Lleida de la Federación de Padres de Alumnos de Catalunya (Fapac), Elisa Solé, indicó que están a la espera de que se apruebe formalmente esta medida e insistió en que debe haber un reparto equitativo que incluya a las escuelas concertadas, que apenas escolarizan a inmigrantes. Añadió que para ello también hay que reducir la ratio máxima de forma general.

La federación de padres reclama que los centros concertados acojan a más alumnos inmigrantes

lleida

Un estudio sobre la atención a la diversidad cultural en 545 centros catalanes ha detectado la falta de formación en los docentes de aquellos colegios donde hay menos alumnado extranjero. Así lo explicó ayer el profesor de la UdL Jordi Garreta en la presentación de dicho estudio en un congreso en la UdL. Garreta destacó que un 16% de los centros encuestados considera que la formación a los docentes sobre la integración de alumnos inmigrantes es insuficiente, “una percepción que se incrementa a medida que lo hace la presencia de alumnado de origen extranjero”. En este sentido, destacó que la formación “debe ser por igual en todos los centros tengan o no tengan inmigración en las aulas”. El estudio también refleja que desde el año 2000 y con la llegada de extranjeros al país, cada vez se ha trabajado más en los centros sobre la diversidad. “No solo con formación a los profesores, sino a padres e incluyendo el tema en varias asignaturas del currículum escolar”, explicó Garreta. Asimismo, el presupuesto de la Generalitat dedicado a políticas de diversidad cultural disminuyó a partir de 2009, coincidiendo con la crisis. Sin embargo, en 2016 hubo una cierta recuperación. Según datos de la conselleria de Enseñanza, Lleida tiene 13 escuelas con máxima complejidad, con entre el 50% y 80% del alumnado extranjero.

El colegio Joan XXIII de Lleida tiene un 80% de alumnado extranjero, pero según destacaron ayer el director y la jefe de estudios, Josep Maria Torrelles y Marta Florences respectivamente, “esto no condiciona en el éxito académico de los alumnos”.

Esto es debido, explicaron, gracias a las comunidades de aprendizaje que se hacen en las aulas y así lo ratifican las pruebas de competencias básicas que Enseñanza efectúa todos los años y los resultados de exámenes de la misma escuela.

Torrelles y Florences destacaron además que uno de los problemas que sufre el centro es el cambio constante de domicilio de los alumnos, provocado por el trabajo de sus padres. En otro orden, el estudio sobre diversidad cultural de la UdL analizó qué acciones realizan los centros catalanes para atender la diversidad. El 74,7% tiene plan de acogida, el 73,4% adapta los menús del comedor escolar a la diversidad cultural. Por otro lado, el 48,4% tiene plan educativo de entorno y el 25,7%, aula de acogida. Además, las acciones testadas para trabajar la diversidad cultural más realizadas son el trabajo en el currículum escolar, un 93,2% lo hace, el plan de convivencia, un 63,5% y jornadas interculturales , un 42,8 %, y que mantienen la relación con la mayor o menor presencia de alumnado extranjero.