TRÁFICO INVESTIGACIÓN
Acusan de doble homicidio al chófer del accidente mortal de Tarragona
Se registró el pasado 3 de febrero y murieron una joven de Lleida y otra de Alcoletge
Los Mossos d’Esquadra han cerrado la investigación del accidente mortal de Tarragona en el que fallecieron dos jóvenes leridanas de 19 y 27 años y ya han enviado al atestado al juzgado. En sus diligencias, la Policía catalana acusa al conductor del vehículo, un joven de Lleida de 22 años, de los delitos de homicidio por imprudencia (2), conducción temeraria y conducción sin haber obtenido nunca el carnet. Asimismo, los Mossos señalaron que el joven, Adrián R., ya había sido denunciado por la vía administrativa por una alcoholemia de 0,19 mg/l, una tasa que es penal al no disponer del carnet. El joven, que fue sometido a las pruebas tras ser evacuado al hospital en estado grave, dio negativo en el test por drogas.
El accidente se produjo a primera hora del pasado 3 de febrero en la carretera T-11 cuando un Volkswagen Gold de color gris, que iba de Reus en dirección Tarragona, se salió de la vía, impactó contra el muro de la rotonda de Les Gavarres y se precipitó por un terraplén hasta la A-7. A consecuencia del accidente fallecieron las dos acompañantes, que viajaban en la parte delantera y posterior del vehículo, Elisenda Calderó López, de 27 años y vecina de Alcoletge (aunque con muchos vínculos en Aitona y Seròs), y Tàmara Hernando González, de 19 años y del barrio leridano del Secà de Sant Pere. El conductor, tras ser rescatado del interior del coche por los servicios de emergencias, fue evacuado en estado grave al hospital Joan XXII, donde todavía permanece.
La Policía ya había confirmado un día después del fatal accidente que el vehículo circulaba con un importe exceso de velocidad. Concretamente iba a más de 140 kilómetros por hora en un tramo limitado a 40 km/h. Se está a la espera de que una vez finalizada la investigación policial sea el juez quien tome declaración al conductor, aunque habrá que esperar a que abandone el hospital. El joven ha sido operado en varias ocasiones y sigue evolucionando favorablemente.
Posibles penas de hasta 6 años de prisión El joven podría afrontar una pena de hasta seis años y medio de cárcel por los delitos que le imputan los Mossos. El Código Penal prevé entre uno y cuatro años de prisión por homicidio imprudente; de seis meses a dos años de prisión por conducción temararia y de tres a seis meses por conducir sin carnet.