El bibliotecario del Gili i Gaya de Lleida admite las fotos eróticas y el juez le aleja del instituto

El bibliotecario del Gili i Gaya acusado de difundir fotos eróticas admitió ayer las acusaciones y el juez le prohibió acercarse a menos de 200 metros del instituto y de las 5 alumnas afectadas. El magistrado, que le dejó libre con cargos a la espera de juicio, también le retiró el pasaporte. La causa judicial está abierta por abusos sexuales.

El Juzgado de Instrucción 1 de Lleida acordó ayer la puesta en libertad con cargos a la espera de juicio para el monitor de la biblioteca del Instituto de Educación Secundaria (IES) Samuel Gili i Gaya detenido el pasado domingo por enviar fotografías sexuales a varias alumnas, tal como avanzó SEGRE ayer. El juez, a petición de la Fiscalía, acordó medidas cautelares para su puesta en libertad, como la retirada del pasaporte y la prohibición de comunicarse o acercarse a menos de 200 metros del centro y de las cinco alumnas de Bachillerato a las que envió las fotografías de él desnudo o en actitud erótica. El detenido, J.M.C., de 39 años, pasó ayer a disposición judicial tras permanecer en la comisaría de los Mossos d’Esquadra desde el domingo, cuando fue detenido acusado de un delito de abuso sexual. El investigado declaró ante el juzgado de guardia durante 45 minutos y reconoció que había enviado esas fotografías a cinco alumnas del centro al señalar que “la situación se me había ido de las manos”. Finalmente, quedó en libertad con cargos después de que la Fiscalía no solicitara su ingreso en prisión. Según informó el Tribunal Superior de Justicia, la causa judicial está abierta por un delito de abusos sexuales y ahora la instrucción deberá determinar el número de víctimas (de momento son cinco) y el tipo de material que intercambió con ellas el monitor y si el contacto llegó a ser físico.

El acusado llevaba ocho años trabajando como personal de refuerzo de la asociación de padres del Gili i Gaya y era el encargado de la biblioteca del centro. Tras su arresto el domingo, el Ampa y la dirección del centro enviaron una notificación a los padres de los alumnos informando que habían considerado oportuno “extinguir” el contrato al bibliotecario, así como cualquier vinculación entre este y el instituto.

“Siempre tenía el sexo como tema de conversación”

El monitor de biblioteca del instituto Gili i Gaya “siempre tenía el sexo como tema de conversación”. Así lo comentaban ayer varios alumnos del centro, quienes relataban que el acusado solía tener comentarios irrespetuosos “en diferentes temas”. Así, diversos escolares explicaban que el ya extrabajador del Ampa solía colgar imágenes con contenido sexual en algunas de redes sociales en las que se le veía completamente desnudo. “Se tapaba sus partes usando emoticones y hasta usó un crucifijo”, detallaron. Además, algunos de los estudiantes también dijeron que habían escuchado al monitor hacer comentarios racistas y machistas dirigidos a alumnas del centro. “Estas expresiones hacían que algunos compañeros se sintieran incómodos y el hecho de compartir este tipo de fotos a través del móvil fue la gota que colmó el vaso para que una compañera fuera a avisar a dirección”, explicaron.