Detenidos dos vecinos de Lleida en Alcarràs por pescar ilegalmente en la cuenca del río Segre

Los Mossos D'Esquadra, conjuntamente con la Policía Local de Alcarràs, detuvieron el lunes pasado dos hombres, de 31 y 35 años, de nacionalidad rumana y vecinos de Lleida, como presuntos autores de un delito contra la flora y la fauna. La investigación, según ha informado a la policía autonómica esta mañana en un comunicado, se inició la madrugada del 7 de marzo durante un patrullaje preventivo de la Policía Local de Alcarràs por un polígono de la población. El agentes observaron una furgoneta parada que, al darse cuenta de la presencia policial, intentó huir. Después de un breve seguimiento, consiguieron pararla cuando se incorporaba a la carretera N-IIa e identificaron a los dos ocupantes. En el interior del vehículo localizaron cinco sacos grandes cargados de redes y peces, una barca inflable con sus remos y dos trajes de pesca impermeables.

Ante el hecho de que se podrían encontrar ante un posible delito, aparte de infracción de la Ley de pesca, identificaron a las dos personas y decomisaron toda la carga para estudiar su contenido, la cantidad de peces capturados, la posible presencia de especies protegidas y las herramientas utilizadas para pescarlos. Al día siguiente comunicaron los hechos a la Unidad Regional de Medio Ambiente (URMA) de la Región Policial Ponent, quien se hizo cargo de revisar el material intervenido.

Se comprobó que habían utilizado cinco redes de 20x5 metros con una luz de 8x8 centímetros. En estas habían quedado atrapadas 103 carpas (Cyprinus carpio) de unos 50 centímetros de longitud media y 2 siluros (Silurus glanis) de unos 75 centímetros, sumando un total de 500 kilogramos de pescado.

Sólo dos días después, la madrugada del 9 de marzo, la Policía Local de Alcarràs interceptó nuevamente otra furgoneta, ocupada por cinco hombres y cargada de utensilios de pesca y peces. En este caso fue parada en el camino del Río y dentro del vehículo llevaban dos barcas de pesca desinfladas, dos salabardos grandes, dos ganchos metálicos, dos baterías con 8 metros de cableado eléctrico y dos sacos llenos de peces. En este caso los habrían pescado con el método ilegal de la pesca eléctrica. Entre las personas identificadas, todos vecinos de Lleida de edades comprendidas entre los 27 y 55 años de edad y nacionalidad rumana, había nuevamente los dos identificados anteriormente.

Nuevamente el URMA inspeccionó la carga y comprobó que llevaban 25 carpas de 75 centímetros de longitud y 14 siluros de 150 centímetros, sumando un total de 400 kilogramos. Constataron que el material eléctrico permitiría realizar descargas eléctricas en el entorno acuático para aturdir los peces y capturarlos fácilmente con los salabardos y los ganchos.

Por eso, el pasado lunes los mossos detuvieron a las dos personas que coincidieron en las dos actuaciones, dos vecinos de Lleida de 31 y 35 años de edad, y denunciaron el resto, como presuntos autores de un delito contra la flora y la fauna. La normativa actual de pesca en aguas continentales prohíbe el uso de procedimientos masivos o no selectivos para la captura de animales, en concreto las redes o la pesca eléctrica, limitando su uso al control poblacional o uso científico con la correspondiente autorización.

Se investiga el destino final de los peces y si puede haber un comercio lucrativo con los animales. Los dos detenidos quedaron en libertad después de declarar en la comisaría con la obligatoriedad en presentarse ante el juez cuando sean requeridos.