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TRIBUNALES SUCESOS

Escuchas telefónicas incriminan a un acusado de matar a un temporero

El hombre solo admite en el juicio haber apuñalado a otro joven, por lo que acepta dos años de prisión || “Si fuera culpable, me habría escapado”, afirma ante la jueza

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A.H., un hombre de 52 años acusado apuñalar mortalmente a un joven de 21 en la pista deportiva de la antigua escuela de Albatàrrec durante una pelea tumultuaria entre dos grupos de temporeros de nacionalidad rumana el 29 de mayo del 2016, negó ayer ante la titular del juzgado de lo Penal 3 de Lleida ser el autor de la agresión y afirmó que “si hubiera sido culpable, me habría escapado”. El acusado recordó que la víctima “era como si fuera mi hijo. Lo teníamos alojado en casa y era de nuestra cuadrilla”. En cambio, sí reconoció haber asestado una cuchillada a otro joven. “Cogí el cuchillo del suelo y le di”. Por esta agresión será condenado a dos años de prisión después del acuerdo entre las partes. La misma condena que se impondrá a su nuera, que propinó un botellazo a la cabeza del joven. Ambos se comprometieron a indemnizarle con 25.000 euros.

Pese a negar ser el autor de la puñalada mortal, las conversaciones telefónicas investigadas por los Mossos d’Esquadra lo incriminan. Una de ellas es la que tuvo la nuera con su pareja. “Puedo decir muchas cosas. ¡No te olvides de lo que ha hecho tu padre!”, dijo la mujer al hijo del acusado. La Fiscalía considera que este propinó accidentalmente “una cuchillada en el pecho a la víctima, que debió interponerse en su camino y al que no tenía intención directa de agredir ya que era parte de su grupo”. Considera que es autor de un delito de imprudencia grave con resultado de muerte y solicita que se le impongan tres años de prisión y que pague una indemnización de 100.000 euros a los padres de la víctima. Otro indicio que apunta a su autoría, según el Ministerio Público, es que su nuera, su hijo y otros miembros de la cuadrilla omitieron ante los Mossos que el acusado había participado en la reyerta. También que regresó a la ciudad de Lleida en una furgoneta diferente en la que viajaba el herido, que murió de camino al hospital, junto a sus familiares.

El apuñalamiento mortal se produjo en mayo de 2016 durante un pelea entre dos grupos de temporeros

Por su parte, la defensa mantiene que nadie identificó ni observó quién atacó a la víctima y que el autor fue un temporero del otro grupo que huyó a toda prisa. El juicio continuará el próximo 18 abril con la declaración de otros testigos y los informes de Fiscalía, acusaciones y defensa.

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