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SUCESOS INVESTIGACIÓN

Alumnas del instituto Gili i Gaya ratifican al juez que un monitor les envió fotos eróticas

Declaran ante el juez 4 estudiantes que tenían con el ya exmonitor un grupo de WhatsApp para el préstamo de libros || Lo denunciaron para evitar nuevos acosos

El investigado quedó en libertad con cargos tras declarar el pasado febrero ante el juez.

El investigado quedó en libertad con cargos tras declarar el pasado febrero ante el juez.SEGRE

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Cuatro alumnas del instituto Samuel Gili i Gaya de Lleida ratificaron ayer ante el juez que el bibliotecario del centro les envió fotografías eróticas (en las que aparecía desnudo) a cinco alumnas con preposiciones deshonestas, con las que tenía un grupo de móvil llamado ‘Orgía’. Se trata de las estudiantes que alertaron de esta situación a la dirección del centro y al AMPA, ya que el monitor, que llevaba 12 años en el centro y fue despedido, estaba contratado por la asociación como personal de refuerzo. La asociación de padres, representada por el abogado Enric Rubio, se ha personado en la causa.

El investigado, J.M.M.C. de 39 años, fue detenido el 19 de febrero como presunto autor de un delito de abusos sexuales. El juez de Instrucción decretó dos días después su libertad provisional con cargos y acordó varias medidas cautelares como la prohibición de aproximación y comunicación con las cinco menores a las que supuestamente acosó y la prohibición de acercarse al centro educativo. También le retiró el pasaporte y le prohibió la salida de España. Reconoció que envió las fotos, que la situación se le “había ido de las manos” y no se ha opuesto a su despido.

El investigado, en libertad con cargos, fue despedido y no puede acercarse ni al centro ni a las afectadas

Las alumnas explicaron al juez que el grupo de WhatsApp se había creado en septiembre de 2016, para el préstamo de libros de la biblioteca. Posteriormente, el investigado cambió el nombre que tenía por el de ‘Orgía’ y envió fotografías de penes erectos añadiendo mensajes y proposiciones deshonestas en el grupo y por mensajes privados en esta aplicación y en Instagram. Las estudiantes explicaron que denunciaron el caso al ver para que el monitor continuara con estas conductas con otros menores. Ayer también declararon el director del centro y el presidente del AMPA, que no habían detectado conductas inadecuadas del monitor y que cuando conocieron el caso actuaron con celeridad.

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