Jóvenes científicos instan a mejorar la canalización

Los alumnos de segundo curso de ESO del instituto Joan Oró se preguntaron por qué el tramo urbano del río Segre tiene tantas algas, por lo que durante un mes y medio llevaron a cabo un estudio para averiguarlo. Sus conclusiones son que la exposición al sol de las plantas y el lecho regular del cauce facilitan su proliferación. Este proyecto se enmarca dentro del Congreso de Jóvenes Científicos y Científicas de Catalunya, organizado por el Instituto de Ciencias de la Educación (ICE) de la Universitat de Barcelona, en colaboración del Joan Oró, y que ayer se celebró por primera vez en el Campus de Cappont de la UdL.

En su quinta edición, dedicada al agua, han participado 210 estudiantes de los institutos del Joan Oró, el Francesc Ribalta de Solsona, el Tordària de Tordera y el de Les Roquetes de Tortosa, que expusieron sus proyectos científicos. Los del Solsonès concluyeron que la calidad del agua del río Negre no es buena, como pensaban, sino que contiene organismos que provocan enfermedades. Los de Tordera analizaron la presencia de plásticos en la playa de Blanes y los de les Terres de l’Ebre, las propiedades del agua de la playa de les Avellanes de l’Ampolla.

Alumnos del instituto Francesc Ribalta descubren que el agua del río Negre no es sana

La coordinadora del Congreso, Rosa Vela, destacó que el objetivo es “que los jóvenes aprendan ciencia de manera experimental”. Por su parte, la directora del Joan Oró, Emma Carreras, manifestó que tras el estudio sobre las algas, los alumnos instarán a la Paeria a que revise la canalización del río “porque su calidad y ecosistema se puede mejorar”.

Durante la jornada, los alumnos investigaron cómo puede un submarino subir o bajar y por qué flota el acero en el agua. Y es que la motivación es lo que ha permitido que los estudiantes hayan llevado a cabo con éxito los retos, “es una forma de aprender que nos gusta”, destacaron algunos.