SERVICIOS CONSUMO
El gasto de agua sigue siendo comunitario y no individual en más de la mitad de edificios
La facturación general beneficia a los que más consumen en detrimento de los que gastan menos || El coste de la sectorización, que puede rondar los mil euros por vivienda, supone un freno para hacerla
Más de la mitad de los contadores de agua en servicio en la ciudad son comunitarios, es decir, que solo hay uno para todos los pisos y locales de un edificio. Según los datos facilitados por la Paeria, a finales de 2017 había un total de 80.840 usuarios, entre viviendas, establecimientos, empresas y entidades, dados de alta en este servicio. De ellos, 42.041 tienen contadores comunitarios, lo que supone el 52% del total, frente a los 38.799 individuales. A lo largo de los últimos cinco años, se han individualizado algo más de un millar de contadores comunitarios, ya que en 2012 había un total de 43.368, que suponían el 54,4% del total.
El sistema comunitario perjudica a los usuarios con un menor consumo y, en cambio, beneficia a los que gastan más, ya que el total de metros cúbicos facturados se reparte equitativamente entre todos los usuarios del bloque en cuestión. De hecho, informes relativos a otras ciudades concluyen que los edificios con este tipo de contador gastan más agua que los que cuentan con uno por cada vivienda. En cambio, no tiene incidencia en la cuota fija, que es la misma para todos los usuarios, tanto si tienen contador individual como comunitario.
La individualización del consumo de agua se ve lastrada por el coste, que según estimaron administradores de fincas consultados por este diario es de alrededor de mil euros por vivienda. Lo más habitual es que a partir del contador general haya una única tubería que se va bifurcando por plantas. Entonces, hay que instalar una tubería que vaya a cada piso desde la entrada general. Fuentes del sector precisaron que hay algunos bloques con contador general que tienen tuberías específicas para cada piso, lo que facilita muchísimo su sectorización.
Aplazado el fin de las calefacciones centrales que impone la UE nActualmente, no existe ninguna normativa que obligue a individualizar el consumo del agua. En cambio, una directiva de la Unión Europea sí obliga a individualizar las calefacciones centrales. De hecho, fijaba como límite el 1 de enero de 2017 para hacerlo, pero el retraso del Gobierno español en trasponer esta directiva ha aplazado hasta más allá de 2020 esta obligación.