ECONOMÍA DECLARACIÓN
Medio centenar de leridanos hicieron objeción fiscal
Para que sus impuestos no se destinen a Defensa ni a armamento || Aseguran que en los últimos años su número ha aumentado
El número de objetores fiscales en la provincia de Lleida ha aumentado en los últimos años y se estima que cerca de medio centenar hacen este tipo de desobediencia civil, que no está regulada. “Se trata de una actividad de desobediencia civil y pacífica en la que la persona que lo hace pide que sus impuestos no financien las estructuras militares”, explica Eva, una de las coordinadoras de la Plataforma de ONG’s de Lleida, que ayer dió una charla en el Ateneu La Baula sobre la objeción fiscal y cómo hacerla y es la segunda entidad que más partidas de objetores fiscales recibe del Estado. “Se formaliza en la declaración del IRPF, en la que se practica una deducción para destinar la parte de nuestros impuestos que va a Defensa a una plataforma o ONG promotora de la paz y la justicia social”, explica la coordinadora. “Se enmarca dentro de las objeciones de conciencia, donde la más conocida era la de negarse a hacer el servicio militar obligatorio”, añade. Hay dos maneras de ser objetor fiscal. Por un lado, está la de pedir asesoramiento a cualquier plataforma u ONG que las apoye para que te hagan el cálculo aproximado, mientras que la otra posibilidad es hacer la declaración del IRPF uno mismo y descontar la parte proporcional. “Al no estar regulada no es ilegal, pero Hacienda puede detectarlo y hacerte una liquidación del IRPF paralela o notificarte la afectación para tener la posibilidad de rectificar”, cuenta la coordinadora. Pese a todo, destacan que raras veces suelen avisar al objetor. “Lo he hecho durante más de 20 años y nunca me lo han notificado”, explica un objetor. “El objetivo de esta iniciativa es que, a la larga, podamos decidir a qué partidas queremos destinar nuestro dinero y a cuáles no”, apunta Eva.
Pese a ser una práctica que va en aumento, los abogados reconocen que la mayoría de ciudadanos no suelen hacer este tipo de objecciones. “En líneas generales, nuestros clientes no quieren tener problemas con Hacienda, prefieren estar tranquilos con ella”, cuenta el abogado Alejandro Moragues.