Aprobado casi general en la selectividad pero escabechina en las pruebas para ser maestro

El 97,4% de alumnos leridanos que se presentaron a la selectividad la han superado (han suspendido solo 42 de 1.656), mejorando dos puntos respecto al año pasado, cuando aprobaron el 95,4%. Sin embargo, solamente han superado las pruebas de aptitud personal para acceder a un grado de Educación poco más de la mitad de los 312 que se presentaron, un 53,84%.

Los leridanos han sido los segundos mejores de Catalunya en las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), por debajo de Girona, con el 98,1% de aptos, mientras que en Tarragona y Barcelona la han superado el 96,3%. En toda Catalunya se presentaron 28.782 alumnos, y el 96,6% han aprobado, con una media del 6,622.

Los alumnos de Lleida tienen también la segunda mejor media en la selectividad detrás de los de Girona, con un 6,630 y un 6,764, respectivamente. Sin embargo, tienen la mejor media en el Bachillerato, un 7,5, y la mejor nota de acceso a la Universidad, un 7,182 –el 60% del Bachillerato y el 40% de la selectividad–.

Por comarcas, han aprobado todos los que se presentaron de Alta Ribagorça, Pallars Jussà, la Segarra, Solsonès y Urgell, mientras que en el otro extremo del ranking se sitúa la Val d’Aran, con el 95,65%.

Sobre el gran número de suspensos entre los aspirantes a acceder a un grado de Educación, el decano de esta facultad, Carles Alsinet, afirmó que estudiarán en profundidad los resultados y apuntó que, tras un primer análisis, han constatado la existencia de “notas muy malas o muy buenas”, no de nivel medio. Estimó que los alumnos procedentes de ciclos formativos tienen más dificultades con las lenguas y las matemáticas, al no tener estas asignaturas en sus estudios, y consideró que muchos estudiantes podrían haberse confiado en exceso, puesto que las pruebas del año pasado arrojaron unos buenos resultados. En todo caso, indicó que el 21 de julio está prevista una recuperación por primera vez en Lleida (el año pasado se hizo solo en Barcelona) y auguró que al final no habrá problemas en llenar las plazas de los grados de Educación.

«El secreto es la constancia y el trabajo de cada día»

Maria Ciria. Lestonnac (Lleida)

Maria no se esperaba sacar la mejor nota de la selectividad en Lleida, un 9,7, y junto con la media de Bachillerato, un 9,91, y la fase específica, le queda un 13,7 de nota de acceso, por lo que no tendrá ningún problema para estudiar Medicina en la Universitat de Barcelona. “Salí de la selectividad satisfecha, pero no me esperaba ser la mejor”, manifiesta. Asegura que el resultado final no es solamente suyo. “Ha sido gracias a mis profesores que me han motivado mucho a lo largo del curso, además de mis padres y mi hermana que han estado a mi lado. Esta nota es de todos”, destaca. Confiesa que el secreto está en la constancia y en el trabajo diario “y no dejarlo todo para el último día”, además de ir tranquilo a la selectividad y ser positivo pensando que “irá bien”. Ahora empieza un largo recorrido en Medicina. “Me gusta mucho el campo de la investigación y el trato con pacientes, aunque no sé qué línea escogeré”, explica.

«Hay que saberse organizar sin agobiarse»

Pau Baldillou. Vedruna (Balaguer)

Pau es uno de los dos alumnos que con un 9,5 empatan con la segunda mejor nota en la selectividad. “No existe ningún secreto, solamente estar al día con el trabajo”, explica. Destaca que lo más importante es saberse organizar, “sin agobiarte y ponerte más las pilas en épocas de exámenes”. De media del Bachillerato tiene un 9,9 y de acceso a la universidad, un 13,646. “Quiero hacer el doble grado de Matemáticas e Informática en la UB”, señala. Y es que es un apasionado de los números, pero prefiere combinarlo con otros estudios.

«No hay que dejarlo todo para el último día»

Daniel Herencia. Institut Màrius Torres (Lleida)

Daniel es el otro estudiante con la segunda mejor nota. “No me lo esperaba, pero me ha hecho mucha ilusión”, explica, y asegura que días antes de las pruebas solo se dedicó a repasar “porque la materia la llevaba al día”. Y es que para él ahí esta la clave, “no dejar el estudio de un examen para el último día”. Quizá por eso tiene de media un 10 en Bachillerato y de acceso a la universidad un 13,8, aunque durante el curso ha ido desconectando haciendo deporte. Quiere estudiar Ingeniería de Telecomunicaciones en la UPC y, aunque la nota de corte no es muy alta, “he sacado lo mejor de mi”. Tampoco se olvida de sus profesores ni de la familia para lograrlo.

El inglés sube más de un punto en la media Pau es uno de los dos alumnos que con un 9,5 empatan con la segunda mejor nota en la selectividad. “No existe ningún secreto, solamente estar al día con el trabajo”, explica. Destaca que lo más importante es saberse organizar, “sin agobiarte y ponerte más las pilas en épocas de exámenes”. De media del Bachillerato tiene un 9,9 y de acceso a la universidad, un 13,646. “Quiero hacer el doble grado de Matemáticas e Informática en la UB”, señala. Y es que es un apasionado de los números, pero prefiere combinarlo con otros estudios.