El acceso de inmigrantes a la universidad, bajo mínimos

La proporción de jóvenes de familias inmigrantes establecidas en Lleida que acceden a la universidad es solo la tercera parte que los de nacionalidad española. Así lo refleja un análisis de la Universitat de Lleida (UdL) de los datos de los jóvenes de 17 y 18 años de Lleida que hicieron la selectividad y se matricularon en alguna universidad (en la UdL o en el resto de las catalanas) el pasado curso. La propia UdL solo tiene alrededor de un 6% de alumnos de familias de origen inmigrante, cuando los jóvenes de este colectivo representan casi el 20% del total.

Por ello, los vicerrectorados de Docencia y Estudiantado de la UdL impulsarán una comisión para proponer medidas que permitan aumentar el número de universitarios inmigrantes. Además, en la misma habrá profesores expertos de distintas áreas, miembros del vicerrectorado de Relaciones Internacionales y del Consejo Social de la universidad. También se invitará a responsables de los departamentos de Enseñanza y Trabajo y Asuntos Sociales, así como a personalidades del mundo de la educación en Lleida y a representantes de organizaciones sociales.

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Los datos del último curso constatan que hay grandes diferencias entre los distintos colectivos de inmigrantes ya que, por ejemplo, el acceso a los estudios superiores mucho más elevado entre los jóvenes de familias procedentes de países de la Europa del Este que de los del norte de África.

Asimismo, en algunas nacionalidades hay grandes disparidades entre hombres y mujeres. Son diferencias que no obedecen solo a cuestiones económicas, sino a otras como la religión o la cultura. El objetivo de esta comisión será proponer medidas concretas en un plazo de dos meses, para trasladarlas entonces al consejo de gobierno de la UdL para su aprobación. Una vez cumplimentado este trámite, las notificará a las administraciones implicadas.

Fuentes de la universidad destacaron que “uno de los factores claves para garantizar la cohesión social del país es que el número de personas que accedan al nivel superior de formación sea transversal y similar en todos los colectivos, independientemente del nivel económico, de la nacionalidad, el sexo o la religión”.