El paciente del Arnau denuncia que le dan el alta por su queja pública

Albert Cogul, el paciente con paraplejia del Arnau que denunció públicamente en este diario haber tenido que esperar casi 36 horas para una operación que estaba programada, aseguró ayer que el hospital le comunicó que le daba el alta, decisión que cree que es consecuencia de su queja. “Antes de la intervención me dijeron que después de esta tendría que estar ingresado otros diez o 15 días más y hoy (por ayer), cuando han venido a hacerme la cura, me han propuesto darme el alta”, explica Albert. En cambio, él aseguró a los médicos que no se encontraba bien y que la herida (en la espalda, a causa de una infección originada por el rechazo de su cuerpo a las piezas que le fijan las vértebras) le mantiene muy limitado, por lo que no se ve en condiciones de dejar el hospital. “En medio de esa conversación hicieron referencia a mi denuncia diciéndome que antes de hacer una queja en el periódico tenía que haber hablado con ellos. Creo que el alta es una causa-efecto”, asegura. El paciente se negó a recibir el alta. Poco después recibió la visita de la trabajadora social y la situación quedó a la espera de las próximas curas. Desde el Arnau explicaron que los médicos contemplaron la posibilidad de darle el alta porque las curas de la herida podían hacerse ya sin anestesia y el paciente solo tendría que volver cada dos días a consultas externas.

Albert, que sufrió un accidente deportivo hace dos años que le dejó en silla de ruedas, lleva ingresado en el hospital casi un mes y medio. La semana pasada le programaron una intervención para el martes por la mañana. Sin embargo, no entró en quirófano hasta el miércoles por la noche. El Arnau aseguró que el retraso se debió a la llegada de dos operaciones de urgencia.

Albert Cogul tuvo que esperar casi 36 horas para someterse a una operación que estaba programada

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